Lavar los platos, ya sea a mano o en el lavaplatos, es una de las tareas más aburridas de las que tenemos que hacer diariamente en el hogar. Sin embargo, hay trucos y consejos para lograr tener una cocina impecable, con platos, ollas, sartenes, bandejas, utensilios de cocina, cubiertos, vasos y copas relucientes. Aunque no lo creas, hay formas de hacer el proceso más fácil, rápido y con el mínimo esfuerzo. Esto incluye escoger el detergente adecuado, entre muchas otras cosas.
Más en MamásLatinas: 10 Usos sorprendentes del jabón de lavar platos en tu hogar
También la temperatura del agua, el orden en que te encargas de los platos sucios, dónde los pones, la forma en que los recoges de la mesa, quién te ayuda y hasta qué tipo de esponja usas, influye en qué tan eficiente eres en casa a la hora de lavar los platos. Aunque no lo creas, la internet está llena de consejos.
Como suele suceder, algunos de los tips son igualitos a los de tu abuelita y a los de tu mamá y hasta los de tu suegra. Pero otros son novedosos y, aunque parecen ridículos, funcionan muy bien. Para que no pierdas el tiempo descubriendo cuáles son los mejores, hemos reunido aquí a los mejores trucos para que laves tus platos rápido y sin esfuerzo.
Galería hecha con el equipo de MamásLatinas.
Protege todo lo que puedas.
Cuando puedas intenta no manchar muchos platos o vasos que no requieras o usa algunas bolsas para minimizar el manchar tanto.
Protege tus manos con guantes.
Ni se te ocurra fregar con las manos desnudas, eso solo trae resequedad en la piel, las cutículas y además te arruinará la manicura. Usa guantes de hule. Si eres alérgica al látex asegúrate de que no tengan ese material.
Usa un detergente corta grasa.
Si vas a lavar a mano, asegúrate de que el detergente especifique que corta la grasa. Para el lavaplatos ayuda mucho agregar el líquido que quita las manchas de agua.
La cantidad de detergente que uses también influye.
No escatimes con el jabón para el lavaplatos, ni para lavar a mano, para que todo quede reluciente y sin manchas.
Ve lavando mientras vas cocinando.
Lava mientras vas ensuciando, así nunca tendrás una pila de trastos.
Busca ayuda familiar.
Al recoger la mesa, que cada quien enjuague su plato y lo ponga en el lavaplatos, si el lavado es manual, esta tarea le ahorrará tiempo al que esté de turno para fregar. Aunque el lavaplatos haga la tarea, pide que tus hijos lo llenen y lo vacíen.
No apiles los platos sucios.
Lo único que lograrás es manchar la parte de abajo del plato también y tendrás más trabajo.
Lava los platos en el orden correcto.
Según los expertos, el orden es primero las cosas de cristal, luego las de vidrio, después los otros platos, los cubiertos, las bandejas y otros platones. De último deben lavarse lo que tenga más grasa y las ollas y sartenes.
Lava las copas a mano.
En mi casa los vasos y copas de vidrio grueso que se usan para el diario se lavan y escurren en el lavaplatos. Mis copas de cristal las lavo yo a mano y las pongo a escurrir boca bajo sobre toallas de papel absorbente o sobre toallas de lino o algodón limpias.
Clasifica los cubiertos.
Eso hace la tarea de vaciar el aparato más rápida, pues se pueden colocar en el lugar adecuado fácilmente.
Remoja los cubiertos.
Si vas a lavar a mano, remoja los cubiertos en agua jabonosa.
Lava a mano las sartenes y ollas.
La vida del teflón se acorta en los lavaplatos eléctricos. Lávalos a manos, remojándolos primero con agua jabonosa.
No dejes que se pegue la comida.
Puede llegar a ser muy difícil sacar sucio de unos platos empegostados. Lo mejor es pasarles hasta una servilleta en cuanto los levanten de la mesa.
Remoja en agua jabonosa lo que esté muy sucio.
Si te toca fregar a mano, una buena opción es remojar los platos en agua jabonosa. Esto hará que el fregado propiamente dicho sea más fácil.
Enjuaga con cloro.
Si estás lavando a mano, llena el fregadero con agua fresca y agrega un chorrito de cloro. Un enjuague en esa agua te dará la seguridad de que tus platos están libres de bacterias.
Ollas y sartenes quemados
La solución para ollas y sartenes quemados o con comida quemada adherida, es remojarlos toda la noche con agua con sal. A la mañana siguiente pones el agua a hervir en la olla o sartén y verás qué fácil es la tarea.
No te olvides de las bondades del bicarbonato de sodio.
Poner a hervir una olla con grasa pegada con un poquito de agua y bicarbonato de sodio se puede convertir en un acto de magia. Te vas a sorprender de como sale todo el sucio con tan solo pasarle una esponja de metal.
No pongas los platos sucios en el fregadero.
Recuerda que vas a necesitar ese espacio para fregar. Acostumbra a los miembros de tu familia a que, si no van a lavar los platos, los apilen al lado del fregadero.
Desinfecta tus esponjas.
Unas dos veces por semana, después de lavar tu esponja con agua jabonosa, exprímela y ponla en el microondas de uno a dos minutos.
Crea una estación de secado.
Poder poner los platos limpios en el mejor lugar y organizados para secarlos y guardarlos te ahorrará un montón de tiempo.
Usa el vinagre blanco para lograr que los metales queden brillantes.
Darles una enjuagada en agua con un poquito de vinagre hará una gran diferencia.
Usa la cáscara de un limón o una lima para aromatizar sin esfuerzo.
Lo puedes usar para desinfectar la tina (fregadero) al terminar de lavar. También para desodorizar el triturador de alimentos.
Usa papel aluminio para limpiar las cosas de plata.
Si eres de las que te encantan las cosas antiguas ya sabes lo difícil que es mantener la plata limpia y lo que cuesta sacarle las manchas. Sin embargo, hay una técnica increíble y veloz. Cubre un envase con papel aluminio, llénalo con agua caliente y agrega una cucharadita de sal. Sumerge allí tus cosas de plata y verás que en un lapso de media hora quedan limpias, como salidas de la tienda.
Haz que tus aparatos y utensilios de cocina trabajen para ti.
El microondas es un aliado esencial para sacar las manchas de las tazas de café. Pon a hervir agua con jugo de limón y verás como se desaparecen.
El vapor también ayuda muchísimo para despegar manchas de comida. Lo mismo el agua caliente que sale de una cafetera (sin café).
Ten tu loción hidratante a mano
No más termines con los trastos y que todo esté reluciente en tu cocina, ponte loción hidratantes en tus manos. Yo incluso tengo el dispensador de detergente y el de mi loción bien cerquita.