Aunque tenemos la creencia de que el pescado es la carne más saludable, pues no siempre es así. Lamento decirte que, por múltiples razones (que explico con detalle más adelante), comer pescado puede ser hasta peligroso. Sigue leyendo para que veas a lo que me refiero. Y como no hay problema sin solución, también comparto alternativas de pescados que sí son saludables.
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Para deliciosas recetas con pescado, visita mi blog de cocina.
Imagen vía Enriqueta Lemoine
No: Atún blanco

El escolar, al que se le conoce como atún blanco, lo que tiene de sabroso lo tiene de peligroso: comerlo en exceso puede ocasionar diarrea como consecuencia de una sustancia grasa (la gempylotoxina) que el cuerpo humano no puede digerir. Esa sustancia es la que hace que su carne sea jugosa y tenga esa textura "mantequillosa". Si no te resistes, nunca comas más de 6 onzas.
No: Lubina

Los conservacionistas advierten que la pesca en exceso de este delicioso pescado está amenazando la especie. No es peligroso para tu salud en forma directa ahora, pero a la larga afectará el equilibrio de la vida marina y de todo el planeta.
No: Mahi-Mahi

El dolphin (el pez, no el mamífero como Flipper) al que llamamos mahi-mahi, puede provocar envenenamiento por histaminas. Esto ocurre si el pescado no es refrigerado a las temperaturas adecuadas. Para evitar riesgos, cómpralo solamente en pescaderías de confianza.
No: Pez espada

Este pescado que suele cortarse en ruedas (así le gustaba a mi abuela) o filetes, suele estar contaminado con mercurio. Y ten en cuenta que mientras más grande el pescado, más contaminado estará porque el mercurio es de las sustancias que se van acumulando en el organismo.
Sí: Anchoas

Son las sardinas bebés. Frescas, fritas o guisadas con tomate son una delicia. A mí me encantan las enlatadas para comer en ensalada, como ingrediente de pastas y salsas y también para comer con pizza.
Sí: Bacalao

La carne del bacalao se deshace en bocaditos que parecen escamas, es blanca y tiene un sabor riquísimo. Es una gran fuente de omega-3 y de selenio, un mineral que protege las células. No se recomienda que las mujeres embarazadas lo consuman más de una vez por semana para evitar la exposición al mercurio.
Sí: Macarela

Riquísimas en ácidos grasos omega-3 y en vitamina B12, las macarelas, que usualmente son vendidas enteras, son una mina de nutrientes. Como se trata de un pescado pequeño, es mejor que le pidas al pescadero que te las abra y te las limpie y te ahorrarás un trabajón. Ahumadas son una delicia, pero no son recomendables si estás cuidando la ingesta de sodio.
Sí: Salmón

El salmón es riquísimo en ácidos grasos omega-3 y es una fuente estupenda de vitamina D.
Sí: Sardinas

Ricas en omega-3 y no hay riesgo de contaminación. Además son baratísimas. Mira que saborsas se ven las de la foto rebozadas en harina y huevo.
Sí: Truchas de granja

Unos 75 gramos de carne de trucha pueden proveerte la cantidad de omega 3 que necesita tu organismo por día y más también. Además es rica en vitamina B12 que ayuda a reducir el riesgo de enfermedad cardíaca. El riesgo de contaminación con mercurio es literalmente inexistente.