
Todo sabe mejor con hierbas frescas, ¿no es así? Pero normalmente son caras y no duran mucho. ¡No más! Te voy a dar algunos consejos para ayudarte a preservar tus especias favoritas y poder disfrutarlas más que sólo uno o dos días. Y no te preocupes, ¡ninguno de estos tips tienen que ver nada con la jardinería!
__Lee más en ¿Qué más?: 6 Maneras fáciles de comer más vegetales y frutas al estilo latino
__
Prepáralas: Tan pronto las traigas a casa del mercado, debes lavarlas, secarlas completamente y envolverlas en papel toalla. Pon las hierbas ya secas en una bolsa con cierre, asegurándote de sacarle todo el aire. Este método preservará la frescura de tus hierbas por muchos días.
Sécalas: Con este truco, puedes disfrutar del aromático sabor de las especias frescas durante los días de invierno. Hierbas como la albahaca, el tomillo y el orégano secan fácilmente. Lávalas después de comprarlas y luego cuélgalas al revés. En una semana, las hojas estarán completamente secas y podrás ponerlas en una bolsa y congelarlas.
Sécalas en sal: La albahaca y la menta se pueden secar usando sal para que duren más. Todo lo que tienes que hacer es partir las hojas del tallo, echarlas en una bolsa y agregar mucha sal kosher o gruesa. Guárdalas en un lugar fresco y bien ventilado y durarán aproximadamente un mes. Cuando las necesites, lo único que tienes que hacer es sacudirlas para quitarles la sal.
Cubitos de hierbas: ¡Este truco te va a encantar! Solamente pica tus hierbas favoritas muy bien y ponlas en una bandeja de hielo. Vierte un poco de agua en cada cubito y pon la bandeja en el congelador. Tendrás estos cubitos de hierbas congeladas listos para cuando estés cocinando y necesites ese ingrediente secreto que le dará el sabor a tu receta.
Haz una mantequilla de hierbas: Pica muy bien una manada de tu especia favorita, y mézclala con un poco de mantequilla al clima. Asegúrate de que la cantidad de hierba sea mayor que la mantequilla porque queremos preservar el sabor. Podrás usar esta mantequilla con infusión de tu hierba preferida durante todo un año.
Muy fácil, ¿cierto? Ahora puedes disfrutar del sabor de las hierbas frescas cualquier mes del año y decirle adiós a los sustitutos secos. ¡Buen provecho!
Imagen vía Corbis