Se supone que el hogar debe ser el lugar más seguro para nuestra familia, donde todo lo que hay puede ser consumido con confianza. No creas que porque las cosas fueron costosas y compradas es un almacén sofisticado significa que se pueden usar a ciegas. Aunque no lo creas, ciertos objetos en tu hogar pueden ser perjudiciales para tu salud y la de tus hijos. ¡Toma precauciones de inmediato!
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Aquí reuní una lista de ciertas cosas del hogar que debes reemplazar de una vez y por todas antes de que generen problemas de salud para tu familia.
1. Filtros de agua de plástico: A nadie le gusta tomar agua sin filtrar y por eso usan filtros para limpiar el agua. Las jarras plásticas con filtros están diseñadas para que el agua se consuma el mismo día. No se recomienda guardar el agua en plástico por mucho tiempo porque el plástico tiene químicos que son malos para la salud.
2. Cápsulas de café: Son ideales para hacer una taza de café y las máquinas se han vuelto súper populares, pero son un problema. A largo plazo, estas capsulas pueden generar problemas porque se está mezclando agua hirviendo con el plástico. Además son pésimas para el medio ambiente ya que no se pueden reciclar.
3. Sillas de seguridad para el carro: Se supone que están diseñadas para mantener al bebé seguro, pero muchas están hechas de materiales resistentes a las llama, los cuales son químicos que evitan que la silla se incendie. Químicos como el éster de fosfato presente en la tela de las sillas puede ser peligroso para la salud del bebé.
4. Teflón: Tiene que ver con componente principal del teflón el cual es ácido perfluorooctanoico. Aunque está comprobado que este material causa defectos en el nacimiento, problemas hepáticos y hasta cáncer, todavía los venden. No cocines en ellos si el teflón está rayado, mejor usa porcelana francesa si no quieres que se te pegue la comida.
5. Neveras portátiles: Esas neveritas con batería o enchufes miniaturas para guardar las botellas del bebé no son muy buenas. Están hechas de plástico y del mismo componente del teflón. Para evitar complicaciones, guarda los biberones en la nevera normal.
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