Cuando nos enfrentamos a toneladas de ropa arrugada no habría nada mejor que apareciera una varita mágica pero qué va, no hay ni varitas ni pociones mágicas para enfrentarnos a las arrugas.
Sin embargo, yo encontré hace unos días mi propia poción, que no tiene nada de magia y mucho de creatividad, y ando por toda la casa, buscando toda esa ropa arrugada, que metí en los clósets, engañándome a mí misma con la promesa de plancharla cuando la necesitara.
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Llamo poción mágica a la fórmula casera que encontré para deshacer las arrugas y que sirve en cualquier parte. No tiene nada de truco o tecnología y sí mucho de química, que no entiendo, pero que no me importa. Lo único que sé es que significa: ¡NO MÁS PLANCHA!
Como soy my buena y me gusta compartir mi fortuna, te voy a pasar el secreto.
Lo que necesitas es lo siguiente:
1. Una botella de spray (Yo reciclé una de un producto de limpieza, pero asegúrate de lavarlo bien primero)
2. Vinagre blanco
3. Suavizante de ropa en líquido
En la botella, vierte el vinagre y el suavizante en partes iguales. Mezcla bien agitando la botella y ¡listo! Tienes tu propio quita arrugas en la ropa. Si solo existiera algo igual de fácil para las arrugas de la cara sería genial .
Algo que descubrí, es que funciona mejor cuando la ropa está colgada. Si la arruga es fuerte, impregnala con la solución. No pasa instantáneamente, hay que esperar a que se seque, así que no te desesperes.
Imagen vía Corbis