Cuando se trata de chips u hojuelas crujientes, las posibilidades son ilimitadas. Atrás quedaron las papas fritas y los chips de papas. Tanto para acompañar las comidas de tus hijos, como para merendar o picar cuando te apetece algo crujiente, hay opciones muchísimo más saludables, no sólo porque en lugar de freírlas las horneas, sino porque se preparan con frutas y vegetales que son ricos en fibra como la col rizada, las remolachas y las batatas o camotes.
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Imagen vía Enriqueta Lemoine
Batatas horneadas

El lugar de papas fritas puedes hacer estas batatas horneadas que son una delicia y tienen la mitad de las calorías. Aquí comparto la receta.
Chips de betabel (remolacha)

Estos chips de remolacha o betabel son muy fáciles de hacer: sólo necesitas una mandolina para rebanar y estar atenta al horno. Aquí te dejo la receta.
Chips de tubérculos

Puedes combinar remolachas, batatas y nabos. Los rebanas por separado con una mandolina y los fríes, también por separado en abundante aceite vegetal hirviendo, hasta que estén doraditos. Luego de escurrirlas en toallas de papel absorbentes, las sazonas con un poco de sal marina.
Chips de espinaca

Estos chips de espinacas se preparan en 12 minutos. Sólo necesitas precalentar el horno a 350F. Mientras tanto, en un tazón mezclas las hojas de espinacas con un poco de aceite de oliva y sazonas con chile en polvo, comino, sal y pimienta. Cubres una bandeja con papel pergamino y extiendes las hojas de espinaca. Luego horneas las espinacas de 10 a 12 minutos.
Chips de calabaza

Estos chips se peparan con el cuello de la calabaza butternut. Después de pelar la calabaza, la rebanas con una mandolina. De inmediato, la cocinas por 2 minutos en agua hivierndo. Luego distribuyes las rebanadas escurridas en una bandeja con papel pergamino, les das una pincelada con aceite de oliva, sazonas con sal marina gruesa y espolvoreas un poco de queso parmesano rallado. Llevas al horno por unos 15 minutos cuidando que no se quemen.
Chips de col rizada

Esta es la merienda más fácil y más saludable del mundo. Enjuaga y seca las hojas de col rizada. Precalienta el horno a 375F. Quita los tallos y venas de la col, enjuaga y seca con toallas de papel. Coloca las coles en una bandeja cubierta con papel pergamino. Rocía con una gotas de aceite de oliva y sal marina gruesa. Hornea por 4 minutos.