Si me preguntabas hace unos años qué odiaba más, si planchar o limpiar el refrigerador, no habría sabido qué responderte, pues detesto hacer las dos cosas. Afortunadamente, con el tiempo uno va desarrollando sus truquitos y puedo decir que hoy en día no tengo que dedicar mucho tiempo a mantener la nevera en buen estado. Eso sí, hay que entrenar al resto de la familia también, pero no es demasiado difícil.
El primer paso, antes de hacer nada es observar. Así como te lo digo. Fíjate qué es lo que más te piden tus niños o tu marido. Qué es lo que más se quejan de que no encuentran. Ese es el principio.
Lee más en ¿Qué más?: 5 Cosas que NUNCA deben estar en la sala de tu casa
Una vez que hayas detectado eso que hace que te revuelvan dentro del refri, la mitad del camino está ganado. Luego:
1.__Invierte en un buen juego de envases: S__i pueden ser de vidrio mejor, pero si no, asegúrate de que vienen en varios tamaños y que son hechos de un plástico adecuado para calentar en microondas y que se pueden poner en el lavaplatos.
2.No dejes la comida que compres en sus envases originales: Las frutas, los vegetales, fiambres como carnes tratadas (jamón, salami, etc), los quesos, todos pueden ir en los envases especiales y los puedes apilar. Serán más fáciles de encontrar, durarán más y hasta te ahorran espacio.
3. Coloca un protector arriba de los estantes: Yo uso el papel plástico transparente (también viene con un tono azulado). Cuando es hora de limpiar el refri no hay que pasarse horas peleando con restos de comida empegostados.
4. Pon la comida para las meriendas de los niños en lugares bajos: Si tus hijos tienen edad para buscarse sus propios snacks facilítales el trabajo. Yo suelo tener una cesta especial para los juguitos, yogures y bolsitas de zanahorias crudas, manzanas, etc que está a mano para ellos.
5. Haz limpieza, al menos, una vez a la semana: No digo sacar todo, pero sí hacer una revisión y dar una limpiadita. No hay nada más desagradable que encontrar el tiempo para sacar todo y hacer una limpieza general y encontrar aquellas sobras de carne de hace 10 meses. ¡Asco!
Imagen vía The Perfect Fridge
