La curiosidad mató al gato, dice el refrán. Y aquí el gato es un estudiante estadounidense que tuvo que ser rescatado por nada más y nada menos que 22 bomberos en Alemania. Pero cuando te diga dónde estaba este pobre muchacho atrapado, entenderás por qué digo que la curiosidad mató al gato. Y hay más: en menos de 24 horas otro hombre tuvo que ser rescatado del mismo lugar…
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Ambos hombres decidieron adentrarse en una oscura abertura: una enorme cueva de mármol rojo, que parecía invitarlos a entrar y a mirar lo que había adentro, y eso hicieron estos curiosos sin remedio.
Y es que la bendita cueva no es otra cosa sino una monumental escultura del 32 toneladas, hecha de mármol de Verona, del artista peruano Fernando de La Jara, que se exhibe desde 2001 en los jardines del Instituto de Microbiología y Virología de la Universidad de Tübingen, en el sur de Alemania.
Pero lo que no te he contado es de qué va la escultura. Se llama "Making love" (Hacer el amor) y en realidad no es otra cosa que una vagina gigante. Y yo estoy que no aguanto la risa nada más de pensar la vergüenza que habrá pasado el pobre estudiante que hasta le pidió a los bomberos que no revelaran su nombre.
Lo más increíble es que 24 horas antes otro hombre también tuvo que ser rescatado de las profundidades de esta inmensa vagina. Ya ves por qué digo que la curiosidad mató al gato.
Imagen vía Imgur
