11 plantas que puedes sembrar y reproducir a partir de los desechos de tu cocina

No se si la tuya, pero mi abuelita de vez en cuando agarraba una semilla de aguacate, le clavaba tres palillos (mondadientes), llenaba un frasco de mermelada con agua por la mitad y ponía su semillita a esperar que echara raíz. Luego salía un brotecito que se convertía en un tallo con hojitas y al cabo de unas semanas la mata estaba lista para ser sembrada, primero en una maceta y luego, de ahí a la tierra, en el patio.

En una época cuando vivía en mi Caracas natal, hice el experimento de la semilla de aguacate, pero nunca sembré la mata porque vivía en un apartamento. Años más tarde, cuando viví en el soleado sur de California experimenté con ajos, cebollas, cebollinos (cebollas verdes) y comprobé que estas plantas las puedes reproducir a partir de los dientes o bulbos que compras en el supermercado para cocinar. Sigue leyendo para que veas a lo que me refiero.

Lee más en ¿Qué más? 7 usos del orégano que te harán adorar esta hierba

De hecho, cuando me volví una hortelana insigne, compraba las bolsas de bulbos de cebollas morada, amarilla y blanca en Home Depot, Lowe's o Ace esos bulbitos secos eran los que sembraba y al cabo de unos meses de agua y sol, cosechaba mis cebollas.

De verdad es increíble la cantidad de plantas que podemos reproducir en nuestras cocinas a partir de lo que tenemos en la nevera. Así por ejemplo si unos dientes de ajo te retoñan en la nevera o en el mesón de tu cocina, prueba a sembrarlos en un frasquito o maceta y ponlos cerca de una ventana donde le de luz. Verás que al cabo de unos días tendrás unas hojas verdes y largas que si cortas puedes usar para sopas y ensaladas. Lo ideal es que cortes las hojas constantemente para que se fortalezca el bulbo de ajo que está en la tierra.

En el caso de los cebollinos y los puerros (ajoporros), si le cortas la parte verde, pero le dejas las raíz que está en la parte blanca, puedes ponerlos en un frasco o un vaso con agua, también cerca de una ventana, y verás como las hojas comenzarán a crecer. Estas hojas también las puedes usar para cocinar. Así mismo, una vez que la raíz se haya fortalecido y las hojas estén fuertes y sanas, puedes sembrar los tallos en una maceta. Si vas a dejar los tallos en agua, es bueno que cambies al agua con frecuencia.

También puedes hacer lo mismo con el apio. Si usas los tallos y hojas y reservas la base, puedes sembrar esa base en un tiesto con tierra abonada. Cuida de regar con agua regularmente para garantizar que la tierra esté siempre húmeda. A cabo de unos días verás como empiezan a brotar unas hojitas tiernas que crecerán y se convertirán en deliciosos y crujientes tallos de apio. Una vez que la planta tengan suficientes brotes y esté sana, puedes sacarla de la cocina y llevarla al balcón o jardín donde puedan recibir más luz.

Si tienes ramitas de menta y albahaca, prueba a hacer un pequeño buqué y ponlas en un vasito con agua, también cerca de una ventana. Verás como al cabo de dos o tres días comenzarán a salir, de las juntas entre hojas y tallos, unas pequeñas raíces blancas. Mientras más ramitas pongas, mejor, porque aproximadamente un tercio de ellas se pudre y no sobrevive el experimentos. Mientras tienes las ramitas en agua, es bueno cambiarles el agua a diario. Al cabo de unos 10 días puedes sembrar los tallitos en una maceta a la sombra, pero cerca de la luz.

Al igual que el apio, si replantas la base del repollo y te aseguras de ponerla en un tiesto cerca de la luz y con tierra húmeda, verás como empiezan a brotar nuevas hojitas. Esto mismo aplica para las colesitas de Bruselas.

Y si quieres experimentar con la raíz de jengibre, aunque su crecimiento es lento, sólo necesitas poner un pedacito de la raíz que compras fresca en el supermercado, en una maceta con tierra húmeda. Como que se usa es la raíz, descara las hojas y resiembra un pedacito de raíz para que siempre la tengas en casa.

Imagen vía Thinkstock