Típico que voy al supermercado, compro verduras, lechugas y cualquier cantidad de comida saludable para no tener excusas para engordar, pero al final del mes encuentro toda esa comida en un rincón podrida porque estaba detrás del litro de leche y el bote jumbo de mermelada. ¡Desgracia!
Aunque compres comida sana, puede que el culpable de que tengas unos kilitos de más no sea tu cuerpo, ¡sino tu refrigerador!
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Aquí te dejo unos tips para que esto no vuelva a suceder y pierdas peso con una buena organización de tu refrigerador:
Separadores de plástico: Muchas tiendas venden separadores de plástico para organizar la comida en tu refrigerador. Tal vez si ves un poco de orden en el caos, te inspires para crear recetas más saludables o inclusive ahorres dinero y no se echen a perder productos por estar escondidos en los rincones. Aquí te dejo algunos ejemplos de separadores.
Vegetales a la vista: Mi mamá casi siempre los ponía en la última bandeja del refrigerador hasta abajo. Por supuesto que eran lo último que yo veía cuando lo abría para comer un snack. Esto puede hacer que tus ojos vayan directamente a los quesitos o la pizza de ayer. Procura tener en un área central a todos los vegetales bien acomodados para que se te antoje comerlos. Lávalos antes de guardarlos para que no te de flojera hacer el proceso después.
Crea una estación saludable de meriendas: Cuando es media tarde y quieres algo sencillito de comer pero te da flojera hacer todo el show del chef, es importante entonces crear una estrategia que evite que comas lo más sencillo que veas como dulces, helado o productos con conservadores. Mejor cuando regreses del súper pasa 5 minutos más poniendo en un separador de plástico alimentos para crear meriendas saludables como baby carrots (zanahorias bebé), pepinos, jícama, betabel y agrega limoncitos y salsitas en la misma bandeja. De esta forma recordarás que comer snacks no significa comer comida chatarra.
Para las lenguas dulces: Si eres como yo y no puedes perdonar esa merienda dulce a media tarde, sustituye los chocolates en tu refri por una hermosa bandeja de fruta pre cortada. Compra frutas coloridas y ducles como la sandía, granada, plátano, melón, uvas o guayabas y corta la fruta en cuanto llegues a tu cocina para crear una bandeja de snacks dulces saludables. Colócalo en un lugar central del refrigerador.
Elimina la grasa y limpia: Antes de hacer todo esto, comienza por limpiar tu refri y tira todo aquello que esté pasado en caducidad o que sea muy grasoso. Cuando veas a tu refrigerador limpio y ordenado, lleno de comida saludable bien acomodadita, te darán ganas instantáneas de comer saludable también. Si no puedes resistir ese helado, cómpralo pero que sea bajo en calorías y ponlo en un lugar de difícil acceso.
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