Oh, la eterna pregunta … ¿Tragar o no tragar semen? Esa es la cuestión. Bueno, al menos para algunas, porque para el autor Paul "Fotie" Photenhauer, entusiasta de los cócteles de semen, el tema es digno para escribir recetas de cocteles. Sí, en un bar y toda la cosa.
Así como lo oyen. Fotie es el autor del nuevo libro Semenology: The Semen Bartender's Handbook, que consta no de uno, sino de DOS volumenes de creativas recetas para que tu paladar se deleite con nadas más y nada menos que el semen de tu pareja. ¡Qué feo!
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Llámenme clásica, llámenme conservadora, pero ¿cuándo el semen comenzó a ser un delicatessen? Culpo nuevamente a YouPorn y otros sitios pornográficos por idealizar que tanto mujeres y hombres estamos sedientos de la sustancia estrella.
La recetas van desde Slightly Saltier Caviar, Mexican Cumslide y Watermelon Gin Jizz. Confieso que me reí al principio porque, admitamos, los títulos son originales. Pero eso sí, todos tienen al menos una cucharadita de semen.
Como el buen vino, la descripción del libro me deja pensando en quién podría pagar por un coctel así en un bar: "Conducido por el compromiso y la pasión de un ingrediente frescamente cosechado, Semenology empuja los límites del bartending clásico. El conocedor aprenderá a apreciar, por medio de mezclar selectos espíritus, a potencializar los delicados sabores del semen" ¡No me digas!
Dicen que en gustos se rompen géneros y, amigas, aquí es donde se rompío el mío. Aunque para mí tomar un mojito con el ingrediente sorpresa me parezca repulsivo, pienso que hay gente dispuesta inclusive a pagar por ellos con tal de experimentar nuevas tendencias.
OK, si yo viviera en un mundo donde me siento en el bar y pido mi Mexican Cumslide, me pregunto ¿qué tan seguro sería para mi salud? Porque claro que los hombres lo intentan de todo. El semen es bueno para el cutis, te quita las arrugas, es rico en proteínas … ¡Pero para proteínas me como un bisteck!
Regresando al tema de la salubridad, el autor comentó a la prensa que no creó las recetas para servirse en lugares públicos con la materia prima "cosechada" por perfectos extraños. Evidentemente el semen es una sustancia que puede trasmitir enfermedades, aparte de que es asqueroso intercambiar fluidos de esa forma.
En fin, si quieren sorprenderse más, pueden hojear el libro en alguna librería. Confieso que esas fotos fueron más de lo que pude aguantar y no busqué más.
Imagen vía Cookingwithcum.com
