Si hay algo que le gusta a mis hijos son las albóndigas de carne. Se las devoran como si de caramelos se tratara. Tengo una receta heredada de mi mamá que es una maravilla. Lo que no tengo es mucho tiempo para prepararla: hacer las bolitas de carne, empanizarlas y freírlas para después guisarlas. Para no privar a mi familia de uno de sus platillos favoritos, hecho mano de mi receta de "emergencia": compro un paquete de albóndigas pre cocidas congeladas (pueden ser de carne de res, de puerco, pollo o pavo) y las guiso en una salsa de tomate con un poco de ajo, cebolla, una pisca de comino y unas hojitas de laurel, a la que ni siquiera le pongo sal. En 45 minutos están listas. Comparto contigo esta maravilla para que este 9 de marzo celebres con los tuyos el Día Nacional de las Albóndigas.
Albóndigas de carne
Rinde para 8 porciones
Ingredientes:
2 cucharadas de aceite de oliva
1 taza de cebolla picadita (puede der rallada o licuada)
2 dientes de ajo picaditos
1 ½ libra de tomates roma licuados
1 paquete 2 libras de albóndigas pre cocidas congeladas
¼ de cucharadita de comino molido
3 hojas de laurel secas
Pimienta negra recién molida (opcional)
Preparación:
En un sartén profundo con tapa, pon el aceite a calentar a fuego mediano y sofríe la cebolla con el ajo, hasta que se marchiten, unos 4-5 minutos.
Agrega los tomates licuados y el comino, y revuelve. Agrega las albóndigas congeladas. Lleva a hervor y reduce el fuego.
Agrega las hojas de laurel, un poco de pimienta si es tu gusto, y cocina a fuego lento por 45 minutos tapadas. Puede que necesites retirar la tapa y dejar que el líquido merme un poco si deseas una salsa más espesa.
Imágenes vía Enriqueta Lemoine
