Hace dos años cuando llegue a vivir a Estados Unidos, una de las cosas que más me sorprendió, fue ver el gran cuidado que se le tiene a las mascotas en este país. Esto porque en México, por ejemplo, es común ver a los perros callejeros en casi cada esquina, viviendo en condiciones lamentables. Incluso, no es raro verlos atropellados en las autopistas, donde quedan casi "deshechos" luego de que terminen de pasarles por encima, los cientos de autos que avanzan a toda velocidad.
Pues una situación bastante contrastante están viviendo las mascotas en Estados Unidos. Según un reciente estudio de la Asociación Estadounidense para Productos de Mascotas (APPA, por sus siglas en inglés), los estadounidenses gastaron en 2011 más que nunca en productos y servicios para sus animales caseros. Y se calcula que la cifra total superó ¡los 50 mil millones!
Ante tal desembolso, algunos medios se preguntan, cómo es posible que suceda esto, en un periodo de crisis económica como el que estamos viviendo. Si bien quienes tienen los recursos económicos suficientes para tratar a sus mascotas "como reyes", tienen todo el derecho a hacer lo que deseen con sus ingresos. Yo creo que no estaría mal, que los sectores más favorecidos, también dirigieran la mirada hacia quienes en estos momentos están sufriendo de grandes carencias. ¡Sí! De aquel sector que, ahora más que nunca, necesita de nuestra solidaridad humana.
¿Sabías que en Estados Unidos hay actualmente 1.6 millones de niños viviendo en las calles o en los albergues y -sin bien les va- hasta en moteles? Y no lo digo yo, estas cifras fueron presentadas a finales del año pasado por el National Center on Family Homelessness, quien también señaló que este dato representa un incremento del 38 por cientodesde 2007, en los casos de niños que no tienen hogar, informó la agencia de noticias Reuters.
Esto por no mencionar, que además, según datos recientes del U.S. Census Bureau, basados en una metodología experimental que se realizó para medir el nivel de pobreza en Estados Unidos, cerca de un 48 por ciento de los americanos, son pobres o viven con bajos ingresos, informó esta misma agencia en diciembre del 2011.
En fin, creo que estas cifras deberían hacernos reflexionar sobre si las cosas en las que estamos gastando el dinero en este momento de crisis, son realmente importantes y necesarias. Creo que nuestras mascotas, podrían quedarse sin ése lindo abriguito de invierno o sin ésa jaula nice. Quizás podríamos comenzar a destinar un poquito del dinero que teníamos guardado para estos gastos, en dárselo a alguien que lo necesita más ¿no lo crees?
Imagen vía rollanb/flickr