El mundo de la moda es imprevisible y creativo, por eso nos atrapa con sus ocurrencias y con estilos jamás antes imaginados. Pero a veces se pasa de la raya y eso es justo lo que le ha ocurrido a la marca Bstroy con su última colección. La marca establecida en Nueva York ha decidido sacar una línea de sudaderas con los nombres de escuelas que han sido escenarios de masacres estudiantiles y las prendas están llenas de agujeros. Obviamente, las críticas no han tardado en llegar, y con razón.
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Internet ha rugido ante lo que algunos usuarios han descrito como "ordinario" y "una gran falta de respeto". Aunque los diseñadores se han apresurado a explicar que los motivos de la colección son totalmente positivos y que sólo buscaban ahondar en la problemática de la falta de control de armas en el país, han sido pocos los que han entendido la colección desde esa perspectiva.
La colección Samsara ha dado mucho que hablar.
Fue una decisión arriesgada, pero los diseñadores de Bstroy, Brick Owens y Duey Catorze, estaban convencidos de que estas sudaderas eran la forma más atrevida de rendir tributo a los fallecidos en las masacres escolares que dan nombre a sus sudaderas. A la vez, querían resaltar la ironía del fino balance entre la vida y la muerte, pues las víctimas murieron baleados en una escuela, un lugar donde todo el mundo debería sentirse seguro.
Era de esperarse que la crítica en su contra fuera feroz.
Las críticas en redes sociales les han llovido.
Las fotos tras el desfile inaugural se colgaron en redes sociales, donde los usuarios han despedazado a la marca.
Desde gente que vivió la tragedia en primera persona, y que llama a esta colección "asquerosa", hasta otros que aseguran que esta es la forma vaga de tocar un tema tan sensible como el poco control de armas en el país.
Esta última crítica parece que es la que más ha molestado a los diseñadores, pues al ser ambos afroamericanos dicen que llevan años luchando contra el estigma hacia su comunidad.
Sin embargo, su última idea no ha caído para nada bien entre el público y a la vez han acabado siendo criticados por justamente lo que más aborrecen.
Incluso los que intentaron defender la idea acabaron siendo recriminados.
Porque también hubo quien quiso defender esta idea. Algunos usuarios trataron de recordar que la colección buscaba poner el foco sobre la trágica situación que se ha vivido en estas escuelas, pero esas palabras tampoco fueron bien recibidas.
La gran mayoría de usuarios en las redes sociales acabó atacando a aquellos que intentaron defender el diseño. Alegaron que esta no es la manera de llamar la atención sobre este problema y que muchísimo menos la compañía Bstroy debería darse a conocer a costa de estas tragedias.
Uno de los diseñadores intentó así explicar su punto de vista.
"A veces la vida puede ser dolorosamente irónica. Como la ironía de morir violentamente en lo que todos consideramos un lugar seguro, controlado, como es una escuela. Esto nos recuerda de la fragilidad de la vida, lo corta e impredecible que puede ser, pero también nos recuerda su gran potencial", relata el principio de la misiva con la cual Brick Owens quiso –de forma tácita– explicar su inspiración para esta colección.
Los comentarios en su publicación no fueron para nada positivos, pues los usuarios siguieron recriminando el poco respeto que mostraron por las víctimas y sus familias con estos diseños.
Por si fuera poco, la compañía habría decidido vender las sudaderas.
Aunque en un principio la idea era que las sudaderas sólo fueran utilizadas durante el desfile de presentación de su colección de primavera 2020, la compañía habría decidido venderlas al público, lo que ha hecho que las críticas hayan aumentado en las redes sociales.
Una cosa es tomar una mala decisión artística, pero otra muy diferente es banalizar una situación tan complicada e intentar lucrarse de ella directamente.
De momento, las sudaderas no están en su tienda virtual. Quizás con tantas críticas Bstroy ha tomado la decisión correcta y ha optado por guardar las sudaderas en un cajón.
