Cuando hace frío es fácil olvidarse de todas las cosas que nos pasan en el verano, comenzando con los muy fastidiosos problemas típicos de la moda de los meses calientes y las visitas a la piscina y la playa. Afortunadamente, hoy en día hay todo tipo de soluciones buenísimas para ahorrarnos los disgustos, preocupaciones, y hasta el dolor que nos causan los esfuerzos que hacemos y la ropa que usamos para vernos lindas, sexy y estar frescas en la mejor temporada del año.
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Estamos hablando de esos problemas que nos pasan a todas cuando usamos sandalias, chancletas, pantalones cortos, minifaldas, vestidos o camisetas con tiritas finas o tops strapless y diferentes estilos de trajes de baño. Quizá te suenen las palabras ampollas, incomodidad en las partes íntimas y extrañas marcas de un mal bronceado. Todas hemos pasado por estas experiencias.
Pero existe la forma de no tener ni la más mínima molestia en los pies en verano, tener siempre zapatos en perfecto estado y evitar las embarazosas marcas de sudor en ciertas ropas. ¡Sí, la era de solucionar los problemas de la moda en verano ha llegado y aquí te contamos cómo lograrlo. Lo mejor es que todos los tips son fáciles y no cuestan mucho dinero!
Las ampollas en los pies parecen inevitables en verano.
En realidad, sería más acertado decir que parecían inevitables. Para no terminar con los talones o los dedos de los pies destrozados, lo mejor es asegurarte de que las sandalias te queden perfectamente bien, pues las ampollas se producen con la fricción. Sin embargo, hoy en día venden todo tipo de productos para este problema. La mejor recomendación que hemos visto es aplicarse vaselina en el área delicada, y forrar la parte que te molesta del zapato o la sandalia con parches de moleskin.
¿Cómo combatir y tratar las lesiones por el roce de las tiras de los zapatos?
Hay en el mercado productos que parecen desodorantes, pero que previenen el daño en los pies. Su función es crear una capa protectora en la piel. También ayuda usar medias cuando se pueda, solo usar zapatos que te queden perfectamente y, si con el calor se te hinchan los pies, dale una refrescada con hielo y mantente alejada de los refrescos y las comidas saladas.
Hay zapatos que en verano agarran olores terribles.
Lamentablemente, suelen ser nuestros favoritos. La mejor manera de evitar esto es usarlos con medias especiales para la forma, si es que no quieres que parece que no las llevas. Eso no solo protege el zapato, sino tus pies, pues el olor es causado por las bacterias. También te ayudará si los espolvoreas con bicarbonato de sodio después de usarlos.
Los zapatos de materiales sintéticos están de moda.
También son los más baratos, pero en el verano pueden ser toda una tortura. La mala noticia es que la única forma de estar 100% segura de que no te van a dañar los pies es no comprarlos. Sin embargo, un truco es usar un secador y calentar el material lo más que puedas antes de usarlos por primera vez. Si te siguen siendo cómodos los podrás usar sin problemas. De lo contrario, lo mejor será que los cambies.
Por muy linda que sea la sandalia, quedará deslucida con una pedicure destruída.
Aunque el cuidado de los pies es un tema de belleza, la forma en la que se ven nuestras uñas afecta los zapatos. Un truco que es infalible es darse una capa de esmalte transparente cada vez que vayas a exponer tus pies.
Las chanclas son el uniforme de muchas en el verano.
Pero no es fácil encontrar una que aguante día tras día dando vueltas en tus pies. Si se te llega a romper en la calle, la solución es encontrar algo con que asegurar las tiras debajo de la suela. Para lograrlo puedes usar un alambre, cinta adhesiva extra fuerte, silicón caliente o cualquier otro material que asegure las tiras mientras llegas a casa.
Los tops de los trajes de baño se han convertido en verdaderas obras de arte.
Tienen tiras en lugares que nos hacen ver sexy cuando los tenemos puestos, pero como un rompecabezas cuando nos vestimos con algo escotado. Un buen protector y evitar el sol pueden hacer que las líneas no se vean tanto cuando no los tienes puestos.
Los trajes de baño están cada vez más caros.
Cuidarlos se hace cada vez más importante, pero puede ser difícil con los efectos del sol, la arena, y el cloro de la piscina o el agua salada. Lo mejor que puedes hacer es evitar sentarte con un traje de baño en una superficie áspera, enjuagarlo al regresar a casa y ponerlo a secar de inmediato. También ayuda no exponerlo al sol cuando no lo estás usando.
Los tops que dejan los hombros al aire siguen de moda.
Pero muchas veces es un drama mantenerlos en el lugar adecuado. Las cosas se pueden poner peor cuando estamos en una actividad que requiere movimiento. Para solucionar el problema está la cinta adhesiva para ropa.
Los accesorios pueden ser complicados en el verano.
Se ponen calientes, se rayan y hasta pierden el color. Para evitar este problema, lo mejor es evitar los metales cuando vayas a pasar mucho tiempo al aire libre. También tener cuidado con los de plástico, si vas a estar en contacto con superficies rugosas.
Los vestidos y tops de tiritas son típicos del verano.
Pero justamente las tiritas pueden ser una pesadilla. Para evitar que se caigan, lo mejor es atarlas con imperdibles a las tiras del sostén. También ayuda cortarlas y coserlas a la medida de tu cuerpo.
Algunos looks del verano dan miedo.
No es que sean feos, sino que dan la sensación de que solo moviéndote un poquito se te va a ver algo de más. La solución para eso es la cinta adhesiva para ropa. Es la misma que usan las famosas y rara vez tienen un accidente.
Hay ropa de verano que es imposible llevar con un sostén.
Pero no hay por ello que preocuparse por enseñar demasiado. Existen cubre pezones que funcionan como sostenes.
Los shorts de moda están cortísimos.
Lo mejor es usar panties estilo hilo dental, para que no te preocupes de que se vean. Si quieres mantener el look sexy, pero con más modestia, le puedes coser una cinta de encaje gruesa en las piernas.
La ropa de verano suele ser de tela liviana.
Eso, lamentablemente, significa en muchos casos transparencias, o tela que se levanta fácil o se pega demasiado. La solución está en la ropa interior. Con los atuendos que tengan este problema, escoge piezas que no dejen marca. También ayuda prestarle atención a los tejidos. Como siempre, lo mejor son los hechos con fibras naturales como el algodón.
La mayoría de los jeans son insoportables cuando hace calor.
Pero eso no significa que tengas que renunciar a ellos. La mayoría de las marcas conocidas tienen modelos de tela de mezclilla livianísima, con un gran contenido de algodón, que dejan que la piel respire y te mantienen fresca.
A veces usar colores claros, tan necesarios en verano, puede ser una pesadilla.
Es tan fácil mancharse, que a veces parece que los tonos blancos y de colores pasteles se ensucian tan solo de verlos. No te vamos a decir que tengas cuidado. Sabemos que eso está de más. Sin embargo, una solución para esas manchitas desagradables es tener a mano uno de esos bolígrafos de detergente, o toallitas con el mismo producto. ¡Son lo máximo y ayudan bastante!
Es dificilísimo no mancharse la ropa con el protector solar.
Para evitar que te estropees algunos de tus looks favoritos con esos productos, que en algunos casos manchan permanentemente, te conviene ponerte el protector antes de vestirte, y esperar unos cinco minutos a que se seque.
Las telas sintéticas dan calor y hacen sudar.
Además, agarran a veces hasta el más mínimo olor corporal. Mientras mayor componente de materiales artificiales tengan las telas, peor el problema. Lamentablemente, no hay nada que hacer. La mejor opción es usar tejidos naturales, como algodón o seda. Además, son los mejores para la salud.
La diferencia entre el tiro y el largo de los pantalones cortos puede ser una pesadilla.
Es difícil encontrar los que nos funcionen en todos los sentidos. Sin embargo, no hay que rendirse y escoger el que te quede mejor, aunque sea el más caro. Acuérdate, el largo de las piernas de un pantalón corto se puede alterar, pero el tiro no se puede cambiar.