Frida Sofía/Instagram, Michelle Salas/Instagram
Las primas y rivales Michelle Salas y Frida Sofía llevan tiempo distanciadas, la hija de Alejandra Guzmán duró semanas lanzándole indirectas y –no tan indirectas– a su prima, tanto en redes sociales como en los diferentes medios que le daban la oportunidad de hablar sobre el tema. Frida Sofía siempre ha dicho que ella tiene bien claro que en belleza no puede ganarle a su prima, sin embargo, no se puede negar que tiene un cuerpazo espectacular. Por eso quisimos hacer un duelo de los mejores bikinazos de ambas, para ver si es verdad que hay tanta diferencia entre ellas.
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Michelle es bastante más recatada que su prima. La hija de Luis Miguel y Stephanie Salas es un chica refinada y elegante, aunque sí llegó a hablar de los problemas familiares que vienen enfrentándola con su prima. De la misma manera, cuando publica algunas de las fotos de sus sesiones en la playa, es capaz de cortar la respiración a más de uno de sus seguidores.
Por su parte Frida Sofía, es todo sensualidad y seducción. Ella sigue manteniendo que no es tan guapa como su prima Michelle, pero sin duda tiene lo suyo. Su cuerpo es de infarto y es su personalidad –muy lanzada y siempre buscando ser el centro de la atención– lo que de verdad la hace destacar. Y dejando a un lado lo físico, la hija de La Guzmán también tiene tremendo talento para el canto y se ha lanzado como cantante. ¿Pero en serio tiene tanto que envidiarle a Michelle, como muchos haters argumentan en las redes? Juzga por ti misma con estas fotos de los mejores bikinazos de ambas, mano a mano.
La hija de Alejandra Guzmán impactó a todos al presumir su trasero en las redes.
Frida Sofía está aprovechando el verano al máximo y ya nos ha dejado una imagen para el recuerdo. Su impresionante trasero en bikini ha causado verdadera sensación entre sus seguidores. Es simplemente espectacular.
Michelle Salas es todo sofisticación.
Las fotos en bikini que suele publicar la hija de Luis Miguel están siempre perfectamente calculadas. Siempre se ve perfecta, todos los detalles cuidados perfectamente, y por supuesto su cuerpo es escultural.
Frida Sofía sabe perfectamente cómo mostrar sus mejores atributos.
Ella es mucho más atrevida que Michelle, y sabe perfectamente cómo poner en alza todas sus virtudes –que son muchas– para estar siempre en el candelero. Por supuesto, cuando no está llamando atención con su físico, puede ser que lo está haciendo con alguna declaración polémica.
Las medidas de Michelle son absolutamente perfectas.
La hija de Luis Miguel lleva años viviendo de su cuerpo. La modelo e influencer ha sabido crearse una marca basada en su atractivo y lo hace con muchísima dignidad.
Frida, por su parte, es todo sensualidad.
Sus poses, sus miradas, todo lo que hace Frida Sofía derrocha sensualidad y esa es su mejor carte de presentación. Ella sabe perfectamente cómo manejarse ante la cámara, aunque su estilo sea completamente diferente al de su prima.
Michelle viaja por todo el mundo paseando sus espectaculares curvas.
Nairobi, Thailandia, Hong Kong o Tulum… no importa donde, Michelle siempre encuentra la forma de pasear su belleza por todo el mundo.
Su prima se ha propuesto brillar como nunca.
Frida ha subido una marcha. De un tiempo acá, la mexicana parece claramente dispuesta a brillar por su propia cuenta. Sus fotos son mucho más sexy en redes, sus declaraciones mucho más punzantes y no le da miedo posar desnuda en Playboy o lanzarse como cantante. Frida lo quiere todo.
Michelle tiene una imagen de niña buena.
Aunque es también supersensual cuando quiere, lo cierto es que en comparación a su prima, Michelle tiene una imagen mucho más de niña buena y nada controversial. Esa es quizás una de las cosas que más les diferencia a las primas.
La prima de Michelle es una joven a la que le encanta divertirse, disfrutar y vivir al máximo.
Por eso no pierde la oportunidad de ponerse su mejor bikini y dsifrutar, ya sea durante el día o durante la noche.
Los bikinazos de Michelle Salas y la naturaleza son la mejor mezcla.
A la hija de Stephanie Salas le encanta pasar su tiempo libre en Tulum. El verde de la naturaleza de este paraíso del Caribe mexicano es el mejor complemento para la belleza súper natural de Michelle.
Pero la hija de Alejandra Guzmán no es todo rock and roll.
Frida también puede ser todo dulzura, y lo ha demostrado en más de una ocasión.
Michelle disfruta el verano más que nunca.
La madurez trae consigo la confianza en si misma, y Michelle ha cumplido los 30 años en plenitud, por eso está disfrutando mucho más que nunca este veranito. Sabe que es una persona querida, que es guapísima, y que puede hacer cualquier cosa que se proponga.
Frida trabaja siempre con estilo.
De la prima de Michelle se podría decir cualquier cosa, pues es una chica a la que las polémicas parecen perseguirle. Pero lo que no se puede negar es que es sumamente trabajadora. Incluso en bikini, Frida no se desconecta, pues tiene entre ceja y ceja ser una mujer exitosa en su carrera.
Michelle prefiere relajarse entre sesiones de fotos, siempre cerca del agua.
La carrera de la hija de Luis Miguel es bastante ajetreada. La joven vive entre Nueva York y México, pero también pasa bastante tiempo en Los Ángeles desde que volvió a tener relación con su padre. Por eso prefiere relajarse entre proyectos, en bikini, y cerca del agua.
La rebelde Frida nunca ha sido modelo profesional, pero podría serlo perfectamente.
Aunque la mexicana no ha hecho carrera como modelo como su prima, la chica podría serlo perfectamente. Solo basta con ver su cuerpo para entender que, si se lo propusiera, podría vivir perfectamente del modelaje.
Michelle también tiene lo suyo.
Quizás no pensemos en Michelle como una bomba sexy porque sus armas son otras. Pero viendo ciertas fotos de la mexicana, queda bien claro que la joven seguramente tiene su lado salvaje, aunque lo esconda mucho más que su prima Frida.
Frida es tres años menor que Michelle.
La hija de Alejandra Guzmán tiene apenas 27 años, y muchas veces actúa como tal. Su prima, que ya ha entrado en la treintena, se muestra muchas veces más madura que ella, pero es que incluso sus estilos son diametralmente opuestos, a pesar de que sólo se lleven tres años de diferencia.
La belleza de Michelle Salas es mucho más clásica.
Su esbelta figura y sus refinados rasgos le convierten en una belleza clásica, icónica, mucho más elegante en cierto aspecto que la de su prima Frida. Son polos opuestos, sin duda, pero igualmente ardientes en bikini.
Su prima Frida es un volcán en erupción.
La hija de Alejandra Guzmán tiene un lado mucho más salvaje, más rocketo, más peligroso. Su figura es diferente a la de Michelle, tiene más curvas, que la hacen súper sexy. Su mirada transmite mucho más sensualidad que la de su prima Michelle.
El verano nos deja las mejores estampas de Michelle Salas.
Es la época del año favorita de Michelle. Llega el verano, saca sus mejores bikinis y pareos, y disfruta del sol y del mar haciendo subir la temperatura en las redes. Ninguno de sus seguidores podrá quejarse durante esta época.
Al fin de cuentas, ambas primas lucen como diosas en bikini y naturalmente no tiene por qué competir entre sí, pues ambas poseen un cuerpazo de infarto y cada una tiene lo suyo.