Michelle Salas tiene una colección de fotos hot. La hija de Luis Miguel y Stephanie Salas es una de las jóvenes modelos más sensuales del panorama del entretenimiento latino, por eso cuando publica instantáneas en bikini sus seguidores dejan todo lo que están haciendo y prestan atención. La popularidad de esta guapa y emprendedora modelo de 35 años ha crecido como la espuma en los últimos años y gran parte de culpa la tienen los tremendos bikinazos con los que decora su cuenta de Instagram.
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La mexicana lleva una vida de película llena de glamour, viajes exóticos, grandes hoteles y los mejores restaurantes, tal y como lo pudimos atestiguar con la boda que tuvo en La Toscana italiana con Danilo Díaz y en la que lo sobró fue la bonanza.
En sus redes da buena cuenta de este ajetreo, pero sin duda lo que más llama la atención son las fotos que suele subir cuando está en la playa con sus bikinis favoritos. Michelle tiene un cuerpo espectacular y no le da ninguna pena mostrarlo, por eso hemos querido escoger sus mejores bikinazos, pues no tienen desperdicio. Ya sea en la playa o en la piscina, o con el estilo de bikini que prefiera, sus fotos son siempre espectaculares y hacen las delicias de sus seguidores. No te las puedes perder.
Sabe muy bien lo que tiene y así lo presume.
En enero del 2024, previo a su boda con Danilo Díaz, Michelle Salas nos flechó con este bikinazo de alarido y no lo hizo con una, sino con cuatro fotos y la súper amamos. Ya quisiéramos tener esa silueta y ese abdomen de acero.
Nos deleitó dándose una ducha al aire libre.
Una escapada en yate a Turquía fue el pretexto perfecto para que esta jovencita, que lleva en su belleza lo Salas, pero también lo Basteri, nos presumiera su anatomía en traje de baño, mientras se daba una ducha al aire libre y en altamar.
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Inició el verano luciendo espectacular.
En marzo de 2022 Michelle se decantó por un bikini rojo que dejó ver la maravillosa silueta que posee. Y así dio pie a un inicio de verano súper hot y placentero dándose un baño de mar.
Estuvo en las Islas Baleares.
Michelle Salas elige destinos exóticos para pasearse en bikini y en territorio español hizo de las suyas con un modelito verde que combinó a la perfección con el resto de su atuendo. Sin duda se volvió blanco de todas las miradas.
Lució como diosa entre palmeras.
La modelo mexicana supo sacarle provecho a todo, desde el paisaje natural hasta el ambiente hermoso de las Bahamas, donde lució un bikini estraple y su piel súper bronceada a tono con el verano.
Fue una visitante honorífica en Ibiza.
Para su colección de bikinazos, la hija de Luis Miguel hizo parada en las famosas playas de Ibiza y desde allí mostró por qué es una de las latinas más influyentes de las redes sociales.
No importa el bikini que lleve, ella siempre está regia.
Los seguidores de Michelle Salas están más que acostumbrados a ver imágenes de ella en bikini en recónditos lugares. Este modelito blanco le hizo justicia a sus bellas y agraciadas curvas.
Más piropos para Michelle.
Esta selfi se ganó la admiración de decenas de personas por lo atlética que luce Michelle Salas en su traje de baño de dos piezas. "Te ves fascinante en esta toma de playa", le espresó una persona mientras que otra destacó que es muy aplicada con todo lo que tiene que ver con mantener su cuerpazo.
El estilo de Michelle cautiva allá por donde va.
Ya sea en México, en Nueva York o en alguna playa del sudeste asiático, Michelle no deja a nadie indiferente. Mucho menos cuando se pasea en bikini por algún resort. La mexicana, siempre elegante, va girando cabezas por todos lados.
Su trabajo la ha llevado a todos los rincones del mundo.
Aunque muchas de sus fotos son de Tulum, en su natal México, las redes sociales de Michelle dan buena cuenta de su ajetreada agenda de trabajo. La modelo igual se pasea por las mejores piscinas de Nueva York que se marcha a hacer una sesión de fotos en Nairobi.
A Michelle le encanta sentir la conexión con la naturaleza.
Nada mejor que pasearse en bikini por la bella vegetación de Tulum para recordar que somos humanos y que debemos conectar con la naturaleza a nuestro alrededor. Esto llena de energía a Michelle.
Su cuerpazo es verdaderamente impactante.
Michelle lo tiene todo para triunfar en el mundo de la moda. Es alta, esbelta, bellísima, y tiene unas medidas perfectas que le hacen disfrutar de un cuerpo despampanante.
No cabe duda que el verano es su época favorita del año.
Aunque en alguna ocasión ha comentado que le encanta el otoño en Nueva York, lo cierto es que su rostro se ilumina cuando llega el verano. Michelle saca sus mejores bikinis a pasear y muestra a todos sus seguidores su tremendo cuerpazo.
No importa si está en la playa o en la piscina.
La sensualidad de Michelle va bien en todos los campos, por lo que da igual si el agua es salada o clorificada: Michelle siempre se ve genial en sus bikinis que cortan la respiración.
Incluso en los estilos más clásicos, esta joven mexicana marca tendencia.
Con este bikini de Calzedonia, con un estilo muy clásico de talle alto, Michelle parece una modelo de los años 50 en Beverly Hills. Un look que sin duda le va genial a la mexicana.
Pero cuando quiere llamar la atención con sus curvas, también sabe hacerlo.
Sus medidas perfectas de maniquí la convirten en un bombón para el obejtivo de la cámara. Michelle sabe perfectamente como subir el listón de la sensualidad en sus sesiones de foto en bikini.
Un look más hippie también le queda de perlas.
Un bikini espectacular. Sensual, pero con flecos que nos transportan a los años 60, al festival de Woodstock, y Michelle lo sabe llevar tan bien y con tanta personalidad que le queda como anillo al dedo.
Cuanta más piel enseñe, más sensuales sus looks.
Michelle ha forjado su carrera en base de la elegancia. No necesita hacer desnudos ni mostrar demasiado para causar polémica en busca de la fama. Sin embargo, no cabe duda que cuanta más piel enseña más disfrutan sus fans. Esta foto, sin ir más lejos, tiene 36,000 likes en Instagram.
Cuando se encuentra en Tulum, nada mejor que un bikini con motivos florales.
Tulum cautiva por su frondosa vegetación y por eso Michelle elige muchas veces los motivos florales en sus bikinis para pasearse por las bellas playas del Caribe mexicano. ¡Se ve espectacular en ese bikini!
Incluso cuando está en la Ciudad de México encuentra la forma de meterse en su mejor bikini.
Cualquier excusa es buena para pasarse por la piscina y modelar tu mejor bikini. A Michelle no le frenan ni las visitas a su familia a la Ciudad de México, pues siempre encuentra una piscina en la que disfrutar.
Pero donde de verdad se lo pasa bien es en la playa.
Está en su estado natural. El mar y la arena son uno con Michelle, que disfruta como una niña pequeña cada vez que entra en el mar. Y en sus constantes viajes a la playa nos demuestra lo verdaderamente sexy que es.
Muchísimos seguidores le comentan a diario que se parece a su mamá.
La genética tiene eso. Michelle es el calco de su mamá, Stephanie Salas, pues a su edad la actriz y modelo también era una bomba de sensualidad como su hija. Pero Michelle tiene además la elegancia de su padre, Luis Miguel. Eso no lo puede ocultar.
Aunque le encante el Caribe, el Pacífico mexicano también esconde sus secretos.
Al fin y al cabo a Michelle le encanta viajar y conocer lugares nuevos. Por eso, aunque Tulum sea uno de los lugares donde más se le puede encontrar, también se pasea por las mejores playas del Pacífico mexicano, que esconde secretos increíbles.
Entre sesión y sesión, qué mejor que disfrutar de una buena sangría.
La vidad de Michelle puede parecer súper glamorosa, pero esconde también muchísimos viajes, presiones, y trabajo. Por eso a veces hay que tomarse un respiro, disfrutar de un día de playa y de una sangría bien fría.
La vida de Michelle podría ser una película de los años 50.
El glamour y la sensualidad de la mexicana se le escapan por los poros. Ya sea en Beverly Hills o en St. Tropez, Michelle vive una vida que parece sacada de una cinta de cine de la edad de oro de Hollywood, y con su cuerpazo y sus bikinis, nos recuerda a Grace Kelly, Ava Gardner o cualquiera de aquellas bellezas clásicas.
Michelle es la perfección hecha mujer.
Su belleza no tiene ningún defecto, al menos no a simple vista, y por eso la mexicana conquista a todo el mundo por donde quiera que vaya.
En el 2017, como todo el mundo, se sacó una foto en un flamenco flotante.
Fue la foto de rigor de la juventud aquel verano y Michelle no podía fallar con el trend. En una piscina, y encima de un flamenco hinchable, la mexicana sigue viéndose perfectamente bella en su bikini.
