Llegar al altar de blanco es el sueño de toda mujer, pero el proceso puede convertirse en una pesadilla si no te preparas como se debe. Acá te damos nuestros 10 mejores truquitos para conseguir en vestido de novia ideal sin preocupaciones.
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En presupuesto
Sé clara contigo misma al momento de comprar. Recuerda, los vestidos de novia son costosos pero eso no quiere decir que vas a gastar $5,000 sin razón.
No lleves a todas tus amigas
Olvídate de esos programas de televisión. Cuando vayas a comprar tu vestido, lleva a dos de tus amigas más honestas (también podría ser tu mamá o tu hermana) y deja al resto del clan en casa. Menos en más en términos de opiniones.
No inventes con estilos nuevos
Si nunca has usado un escote profundo o encajes, ahora no es el momento para ponerte a inventar. Prefiere cortes y materiales que ya conozcas.
Considera otras opciones
Un vestido de novia no tiene que ser nuevo. ¡Explora otras opciones! Quizás puedas encontrar tesoros ya usados que no tienen nada que envidiarle a los modelos más exclusivos.
¡Y abre tu mente!
Quizás al entrar a la tienda tengas una imagen del "vestido de tus sueños". Pero abre tu mente. A veces, es preferible dejarse llevar por lo que sí te queda bien más que por una simple idea de revista.
Locación y fecha primero
No te pondrías un vestido pesado en pleno verano, ¿o sí? Antes de comprar un vestido, toma en cuenta la fecha, el lugar y hasta el clima para que no termines sufriendo.
Pero no te duermas
Aunque debes tomar tu tiempo para decidir, recuerda que muchas casas de diseño o vestidos te cobran un porcentaje si no pides el vestido con anticipación. La regla es seis meses o más.
Ten a la mano un sastre
Lo ideal sería que tuvieras una costurera de confianza que de verdad conozca tu cuerpo. ¿La otra opción? Comprar tu vestido en tiendas con sastres. De esa manera ellos tienen conocimiento del tipo de tela y corte de cada modelo.
Transforma lo necesario
En un año, en seis meses y hasta en dos meses puede pasar mucho. Así que asegúrate de medirte el vestido y hacer las transformaciones necesarias al menos tres veces antes del día especial.
De adentro hacia afuera
¡Por favor! Lleva el mismo sostén (ropa interior y hasta faja) que planeas usar el día de tu boda. De esa forma tendrás una mejor idea de cómo vas a lucir y hacer los cambios necesarios.