Quizás pienses que el maquillaje no tiene su truco, pero como todo en la vida, quedarás sorprendida. Tal es el caso de los rímeles o pestañinas. Aplicarlos correctamente te garantiza unas pestañas kilométricas, definidas y con volumen. ¡Justo como las que ves en los comerciales de televisión! Acá te doy mis mejores consejos para lograrlo en un dos por tres.
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¿Alguna vez alguien te enseñó a usar el rímel de pestañas? La mayoría de las adolescentes comienza por ahí y pocas veces encuentran la ciencia detrás de su aplicación. Para sacarle el mayor partido a tus pestañas, es necesario que sigas ciertas "reglas" que faciliten el proceso y te den una mirada coqueta a más no poder. ¡Verás que es más sencillo de lo que parece!
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Busca el cepillo y la fórmula adecuada: diferentes rímeles ofrecen diferentes resultados, eso es más que obvio. Así que fíjate bien en lo que deseas. ¿Quieres alargar tus pestañas? ¿Definirlas? ¿Qué se vean más espesas? Haz tu tarea y escoge una que se adapte a tu gusto. También asegúrate de conocer la diferencia entre fórmulas regulares, a prueba de agua o de larga duración. ¡Es importantísimo!
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Prepara tus pestañas: aunque para los meros mortales sea un paso extra, créeme, lo vale totalmente. Los primers o prebases acondicionan tus pestañas y las prepara para aprovechar al máximo los beneficios del rímel que apliques.
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Riza: para evitar daños irreparables, riza tus pestañas antes de usar pestañina. No le temas a los métodos tradicionales. El rizado permitirá que la fórmula del rímel haga "milagros" en tus ojos. ¡Ya entenderás lo que te digo!
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Un, dos, tres: empieza aplicando el rímel justo en la base de las pestañas. Esto las levantará, haciendo que tus ojos parezcan más despiertos. Luego desliza hacía la mitad. Basta con una pasadita para que tus pestañas no se vuelvan pesadas. Y, finalmente, aplica en las puntas de las pestañas. Ese 1, 2,3 será la clave para una mirada impactante.
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Da los toques finales: mi mamá siempre terminaba la aplicación con un peinecito. Al peinar tus pestañas, estarás eliminando cualquier grumo o pegote y claro, ayudas a definirlas y separarlas. A pesar de que todo suena muy técnico, ¡te prometo que no te lleva ni un minuto!
Imagen vía iStock
