¡Odio los puntos negros en la cara! No importa lo cuidadosa seas con tu cutis, aparecen por el cebo natural de la piel. Aunque, en ocasiones si no los retiramos a tiempo resultan ser tan caprichosos como si gozaran manteniéndose incrustados en la nariz, en los pómulos y en la barbilla. El proceso para deshacerte de los puntos negros tiene que ser delicado, porque si empiezas a presionar tu piel como si se tratara de un barrito, te puedes dejar marcas permanentes. Hay remedios caseros infalibles y hoy me uno a la lucha contigo.
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Por supuesto que los ingredientes de las dos opciones que te presento a continuación, seguro los tienes en casa y si no, son muy fáciles de adquirir en el súper.
Remedio 1. Esta es mi rutina de belleza favorita una vez al mes. Lo hago desde jovencita. Pon a hervir un litro y medio de agua con unas hojas de menta, lavanda y romero. Deja que hierva y justo en su punto más alto de ebullición, quita del fuego y deja reposar por unos minutos.
Acércate a la olla con la toalla sobre tu cabeza y extiéndela hasta que la mezcla quede debajo de tu rostro. Cúbrete con la toalla para que el vapor llegue a tu rostro (tal cual un baño María). Por favor, asegúrate que tu rostro esté colocado lo suficientemente cerca para recibir el vapor y lo suficientemente lejos para no quemarte.
Quédate ahí por 5 minutos, y después con una gasa o una toallita de algodón, retira los puntos negros que hayan brotado fuera de tu piel, puedes hacer presión suavemente pero no los aprietes. Después, lava tu cara con tu jabón de rostro o si tienes un jabón neutral pues mucho mejor y aplica tu tonificante para cerrar los poros. Si no tienes tonificante agua de rosas también es efectivo.
Remedio 2. Este remedio también ayuda a las espinillas. Mezcla jugo de naranja, yogur natural y una cucharadita de avena. Aplica en tu rostro de manera circular y suavemente. Deja reposar por unos minutos y retira con agua tibia.
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