La actriz Angélica Rivera ha causado sensación en los medios por el traje tan horrible que usó en la ceremonia del Grito de la Indepencia de México. Lo peor de todo es que la gente no deja de criticarla por el costo exagerado del vestido… después de todo, es el dinero del pueblo. ¡Ay, Gaviota, y tanto que te quería el público!
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Y por si fuera poco, tanto el Presidente de México, Enrique Peña Nieto, como su montón de hijos, se gastaron miles de dólares en vestuarios y joyas para esa noche. Sin duda, cada país tiene sus Kardashian. La gran ausente fue la hermana de Peña Nieto, Paulina, quien está viajando por Europa. ¡Qué descarados!
Imagen vía Corbis Images
¡Ni te imaginas cuánto costó!
La actriz fue criticada por escoger un diseñador extranjero –Oscar de la Renta- en vez de uno mexicano, tildándola de “anti-patriótica” y vanidosa. Por muy de marca que sea, el trapo está horroroso. Lo más irónico del cuento es el precio: el alquiler vale 6mil dólares y comprado $30mil. A juzgar por su posición, ¿tú crees que Angélica se va a poner un traje usado por otra? Y te vas a querer morir cuando lo veas de cerca…
No es un trapo cualquiera
El vestido es de la colección Primavera-Verano 2014 de Oscar de la Renta, lo que me hace pensar que Angélica prefiere diseños recientes y no cualquier baratija. Quizás la Gaviota lo vio apropiado para la ocasión, pues se trata de un color “rosa mexicano” pero nada que ver mujer. La tela se ve como una propia cortina, cero lujosa.
¡Lo peor es la espalda!
Angélica ha sido la comidilla de las redes sociales sobre todo por la espalda del vestido. Imagínate, ¡la han llegado a comparar con decoraciones de quinceañeras! Además de su horrible gusto, me atrevo a decir que es una inconsciente. ¿Cómo gastan tanto, pero tanto dinero en unos simples trapos cuando el pueblo mexicano está en crisis? Y espera que veas los modelitos de la familia entera.
Ni qué decir de las joyas
Y su look no estaría completo sin un maquillaje, peinado y joyas a la altura. Rivera cuenta con un arsenal de estilistas que la ayudaron a lucir perfecta durante la ceremonia, sin embargo, con lo que les pagó bien hubiera podido construir varias escuelas y hospitales en las zonas más pobres. Su collar es del diseñador Kenneth Jay Lane, cuyas piezas oscilan entre $300 y 5mil dólares. Mientras que el maquillaje y peinado estuvieron a cargo de Alfonso Waithsman y Jorge Beltrán, dos favoritos de la crema y nata mexicana.
¿Y el traje del Presidente?
Aunque no se han revelado mayores detalles de su vestuario, no es secreto que Peña Nieto adora los trajes de diseñador, siendo Ermenegildo Zegna, Hermès y Salvatore Ferragamo tres de sus favoritos. Vestir de pies a cabeza de marca, como él suele hacerlo, vale alrededor de 25mil dólares por look. Eso sin contar las alteraciones. No me extrañaría que en esta ocasión especial el costo haya sido más elevado. ¡Qué riñones!
Pero el resto de la familia se llevó el premio...
Cual Kardashian en plena alfombra roja desfilaron los retoños de la pareja presidencial –sin olvidar la noviecita del hijo mayor de Peña Nieto–. Todos y cada uno portaron trajes diseñados a la medida pero la que se robó el show fue la hija de Angélica y también actriz, Sofía Castro. ¡Y es que la niña tuvo su propio equipo de estilistas! El creador de su vestido fue el reconocido mexicano Kris Goyri y Vico Guadarrama y John Masbesa se encargaron del maquillaje y peinado respectivamente. No queda duda que con el dinero gastado en semejantes trapos y pomposidades hubieran podido aliviar la situación tan horrible que vive el país.
¿Y la fiesta qué?
La pachanga fue por todo lo alto, invitando a un centenar de personas importantes del país. Se dice que el menú fue “bastante típico, pero elegante”. No me quiero ni imaginar el dinero que gastaron en esas excentricidades. ¡Basta con ver la foto de la decoración para comprobar que costó un ojo de la cara! Ojos que vienen del pueblo, por supuesto.
