Como mujeres del siglo XXI, que vivimos a mil, no nos queda de otra que pintarnos el cabello en casa. Además de rápido es económico y para qué negarlo, a muchas nos funciona de maravilla. Pero, ¿qué hay de las manchas que deja el tinte en nuestro baño o, peor aún, en nuestro cuerpo? Tranquila que removerlas no es más que pan comido.
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Creo a la mayoría nos ha sucedido: terminas de pintarte el cabello y sí, te queda precioso, sólo para descubrir que hay manchas de tinte en el piso, en la alfombra y ¡en tu frente! Las salpicaduras a veces son inevitables sobre todo si se trata de un tinte claro pero sí existen maneras sencillas de remover las "torpezas" sin necesidad de químicos horrorosos. ¡Verás que los resultados valen la pena!
Piel: Remover las manchas de tinte en el cuerpo es complicado pero no imposible. Dependiendo del tono, utiliza la mitad de un tomate o la cascara de una banana y frótalo en la zona que desees aclarar. Repite cuanto sea necesario, aunque para la próxima aplica Aquaphor antes de comenzar a teñir y así evitarás las manchas en primer lugar.
Alfombras: ¡Ay! Cuántas veces no me ha pasado. A pesar de que las manchas en las alfombras parezcan difíciles de quitar, no lo es. Remueve la tintura agregándole leche caliente a la mancha, espera que absorba y pásale un trapito. Luego lávalo a mano o en la secadora como de costumbre.
Toallas: Te advierto que no funciona con cualquier tipo de tela, pero si tu ropa se manchó y es de algodón, seda o lino este remedio podría caerle de maravilla. Frota la mancha con alcohol y remoja la ropa o las toallas en una solución de sal y agua tibia, espera unos 15 minutos y mete a lavar. ¡Sencillísimo!
Baldosas y cerámicas: Estas también pueden mancharse cuando comienzas a sacarte el tinte en la ducha. Si la mancha es fresca, remuévela con una mezcla de cenizas (¡quema una servilleta!) y bicarbonato y agua o, para el tinturas viejas, utiliza cloro y un cepillito de dientes.
Imagen vía Corbis Images