
Una de las partes del cuerpo que más atención necesita es sin duda, nuestra retaguardia: los glúteos. Como no los tenemos siempre al descubierto, tal vez no les damos el cuidado necesario para que se mantengan firmes y en buen estado.
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Las pompis requieren de los mismos mimos que tus senos, tus piernas y tu rostro. La gravedad también hará de las suyas con el paso del tiempo. Por ello es mejor que desde ahora, comiences una rutina de belleza, que se convierta en un hábito, para que ese trasero que Dios te regaló luzca ¡mejor que nunca!
Manos a la obra con estos consejos de belleza para mejorar la apariencia de tus glúteos.
Imagen vía Corbis Images
Ropa de algodón

Desde que recuerdo, mi mamá siempre nos ha dicho que la ropa interior de algodón, es mucho mejor que los modelitos de satín de Victoria Secret. Para el romance no, pero para mantener tus pompis ventiladas y darles respiro durante el día, ¡son ideales!
Sentada largas horas

Mantenerte sentada largas horas del día frente a la computadora o el televisor, hace estragos en tus glúteos. Date descansos y pausas. Levántate y muévete varias veces al día. Tus piernas también lo agradecerán.
Alimentos sanos

La alimentación como insistimos en esta sección de belleza, es imperativa para lograr buenos resultados en cuanto a tu cuerpo se refiere. Una dieta balanceada llena de frutas, vegetales pescados y pocas grasas, son ideales para mantener unos glúteos sin celulitis.
Cremas hidratantes

Las cremas son esenciales para hidratar tu trasero. Hay muchas en el mercado que prometen milagros, pero en realidad lo que ayuda es el masaje que le proporcionas al aplicarlas.
Esponja vegetal

Durante la ducha, utiliza una esponja vegetal que con un buen jabón cremoso ayudará a exfoliar tu trasero y eliminar esos granitos tan diminutos que no son nada atractivos.
Yogur natural

Un remedio casero es importante incluir. Nuestra amigas del Diario del Huila recomiendan que mezcles yogur natural con unas cucharadas de sal de mar. Aplícalo con un guante de baño en movimientos circulares por lo menos una vez a la semana. Pronto notarás lo suaves que quedan tus glúteos.