De todos es sabido que las japonesas son mujeres de poco busto. También suelen ser menudas, de contextura delgada, y hasta delicadas. Y como uno siempre quiere lo que no tiene, pues no me extraña que quieran tener senos más grandes. Pero lo que sí de verdad me parece el colmo es que les hagan creer que se pueden agrandar los pechos comiendo pastelitos dulces ¿O no?
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Como lo oyes amiga. Resulta que en Tokio están vendiendo unos pastelitos que, según los genios de la mercadotécnica encargados de promoverlos, te hacen crecer los senos.
Se llaman F-cup y dicen tener una molécula similar al estrógeno. Según los fabricantes de esta trampa caza bobos, para lograr un resultado óptimos, las interesadas deben ingerir diariamente dos pastelitos –que vienen en dos sabores: chocolate y praliné y leche de soya.
La tal "molécula" que disque hace el milagro de agrandar los pechos de las incautas japonesas, estaría contenida en el extracto de una planta originaria de Tailandia, conocida como Pueraria Mirifica, que se le añade a los benditos ponqués.
La verdad es que a mí todo esto me huele a cuento chino ¿o debo decir tailandés, o mejor dicho japonés? Yo lo único que creo es que aunque dicen tener 70 calorías, si los comes ilimitadamente puedes ganar peso y con las libritas extras, lo primero que se engordan son las lolas, bubis, o coo la llamen
Los fabricantes advierte que el producto no debe ser consumido durante el embarazo o cuando se sospeche de él, la lactancia, y cuando se tienen problemas en el útero, ovarios o cuando se tiene la menstruación.
En fin, este nuevo invento prueba que la estupidez humana no tiene límites. Creo que el día que las latinas nos aceptemos chaparritas, curvilíneas y voluptuosas como solemos ser, y las orientales se acepten menuditas y delgadas como son, en fin, el día que dejemos de querer parecernos al ideal de belleza que la moda y el mercadeo nos quieren imponer, todas seremos más felices, aquí y en la Conchinchina también.
Imagen vía F-cupcookies.com
