Dice mi mamá que cuando no estés segura de la verdadera edad de una mujer sólo le eche un vistazo rápido a su cuello. Es cierto. Por desgracia el cuello no miente y no hay buenas cirugías cosméticas para disimular el paso del tiempo en esta zona.
El daño es lento y gradual, y cuando menos te lo esperas ya tu cuello puede verse como pasita si no comienzas a cuidarlo desde ahora. Pero por fortuna hay mascarillas hidratantes naturales con sábila que pueden remediar un poco del tiempo perdido…
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La sábila tiene propiedades anti inflamatorias, regenera, tonifica y humecta la piel, por lo que es un gran ingrediente a usar cuando se trata de la zona del cuello.
Ingredientes:
1 pepino
1 hoja de sábila verde o aloe vera
2 cucharadas de té verde
3 cucharadas de infusión de manzanilla
Preparación:
Hierve 1 taza de agua con una bolista de té verde y haz lo mismo con la infusión de manzanilla.
Coloca las proporciones de las infusiones en la licuadora y añade todo el pepino cortado en rodajas.
Corta la hoja de sábila y quítale las espinas y la piel. Coloca sólo la pulpa en la licuadora con todos los demás ingredientes.
Licúa todo hasta que quede una mezcla homogénea y refrigera por una hora. Aplica sobre tu cuello con un masaje circular por medio de las yemas de tus dedos y déjala actuar por 20 minutos sobre tu piel.
Enjuaga con agua fría.
Aunque esta es una fórmula perfecta para combatir las arrugas de la piel en el cuello, también puedes usarla para cualquier tipo de resequedad en tu piel con las mismas instrucciones.
Imagen vía Thinkstock