Soy de las que cree que nada dice tanto de ti como tus uñas. Si te las comes, revelas que eres ansiosa; si tienes las cutículas secas y con esos odiosos pellejitos, parecerás desaliñada; si tienes el esmalte pelado, mejor no sigamos hablando porque no hay nada que deteste más que eso.
Como sé que al igual que a mí te importa lucir bien, comparto estos truquitos para que tengas uñas irrompibles, no importa todo lo que hagas en tu casa. Sigue leyendo para que veas de qué se trata.
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Lo primero que hay que tener en cuenta es que nuestras uñas son lo que comemos. Una buena ingesta de minerales, proteínas y vitaminas hará que tengamos uñas saludables. Por eso mi primera recomendación es tomar diariamente un multivitamínico de esos especialmente creados para nosotras, que nos ayudan a fortalecer la uñas y el cabello.
Cuando hagas las tareas de la casa, especialmente si estas involucran agua, usa guantes. Ya verás como prolongas la vida de tus uñas y tu manicura. Yo además tengo guantes de jardinería y cuando me da por arreglar cosas en la casa, no toco una herramienta a menos que tenga mis guantes puestos.
Ten tus uñas siempre protegidas con esmalte, o por lo menos con un brillo o base protectora. Yo tengo la percepción, que coparte conmigo mi manicurista, de que cuando me pinto las uñas de rojo, estas se fortalecen y se parten menos. En mi caso personal, el pánico que me da andar con una uña pelada, hace que sea mucho más cuidadosa con mis manos en general cuando me pongo esmalte rojo.
Regálate una manicura semanal, sea profesional o casera, aplícate un exfoliante, retira las cutículas muertas y ponte esmalte. Tus uñas lo agradecerán.
Aplica aceite de almendras en las cutículas secas y date un pequeño masaje. No te imaginas como este hábito prolonga la vida de tu manicura.
Mantén tus manos hidratadas con una loción humectante. Aplica la loción al levantarte, antes de acostarte, después de que trastees en la cocina, luego de hacer los oficios del hogar. Yo tengo un tubito en mi auto y siempre cargo otro en mi bolso. Cualquier ocasión es buena para hacerle un cariñito a tus manos. Te lo agradecerán.
Aplica protector solar en tus manos cuando te expongas al sol. Cuida que no se aerosol pues te dañará el esmalte.
De vez en cuando, deja que tus uñas respiren, es decir córtalas siguiendo su forma natural y no apliques esmalte o brillo por dos días.