Angélica Rivera, la primera dama de México, mejor conocida como La Gaviota, está hoy de cumpleaños, que celebrará en compañía de su familia y sus amigos queridos en la mansión presidencial de Los Pinos, en la ciudad de México. A sus 44 años, la ex actriz de telenovelas es considerada una de las mujeres mejores vestidas, pero no siempre fue así.
Antes de que cayera en las manos de los asesores de imagen, que probablemente cuesten millones de millones de dólares, La Gaviota prefería los atuendos reveladores, con texturas complicadas y pesados accesorios.
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También se dejaba asesorar mal en cuanto a sus atuendos a la hora de promocionar telenovelas y no tenía los mejores maquilladores y peluqueros. Que eran otras épocas no es excusa. Hay actrices que saben escoger lo que les queda bien. La Gaviota pasó por muchos colores y estilos de cabello desventurados, desde rubios estridentes hasta permanentes furibundas.
Afortunadamente, esos tiempos han quedado atrás y, aunque sus ropas de hoy son demasiado de "señorona" para mi gusto, están mucho más acorde con su posición como la imagen de la mujer mexicana en el mundo.
Pero como no queremos que vaya a retroceder a la época de las locuras, aquí le dejamos una galería con sus peores momentos de moda, para que sirva de advertencia a ella y a otras.
Imagen vía Mezcalent
Demasiado agave
Me parece que el que la convenció de que eso le quedaba bien era su peor enemigo. Entiendo que la querían asociar con la planta del agave, pero ponerle hasta el maquillaje del mismo color, no sólo es de mal gusto, sino que poco inspirado.
Destilando amor
Lo siento Gaviotita, pero ni a tu personaje, ni a ti, les quedaban bien esos rulitos tipo poodle.
Sueño de amor
Sueño de horror más bien. Brocado, con terciopelo, con dorado. No sé. Ni siquiera en los años '90 ese look era bien visto. Demasiado de todo.
¿Vedette?
La actual primera dama mexicana tenía, como te puedes acordar, preferencia por los atuendos llamativos y reveladores. El trajecito no funciona, pero lo que yo quiero saber es quién la maquilló. La diferencia entre el color de la cara y el del cuerpo es impresionante.
Recargada
De nuevo nos damos cuenta que La Gaviota tenía un gusto recargado, con toques rococó.
