Estoy segura, que más de una, hemos querido embellecer nuestra sonrisa, después de ver la hermosa dentadura que la mayoría de las celebridades tienen. Lo malo es que, en mi caso, por ejemplo, no me he atrevido a blanquearme los dientes con láser o con alguno de los tratamientos que anuncian por televisión, por miedo a que mis dientes queden muy sensibles. Y es que, he escuchado, que este tipo de procedimientos, deja a la dentadura, más sensible a los cambios de temperaturas (caliente o frío), así como con mucho dolor.
Y como no quiero, arriesgarme a experimentar, alguna de estas cosas, la verdad es que prefiero someterme a un tratamiento natural y casero. Es por eso, que estuve investigando, algunas opciones para blanquearse los dientes, desde la comodidad de la casa y me alegró bastante, ver que hay varias alternativas; que no sólo te ahorrarán muchísimo dinero en tratamientos, sino que además, te evitarán molestias innecesarias.
Eso sí, antes de proceder con los remedios caseros, hay que dejar en claro, que no hay mejor forma de cuidar la sonrisa, que cepillando los dientes todos los días –tres veces al día– y evitando ingerir alimentos que los manchen, como el café, el refresco de cola, el vino tinto o la salsa de soya. Dicho lo anterior, tomen nota de estos remedios.
Aloe Vera y bicarbonato: Coloca en un recipiente, la pulpa del Aloe Vera, agrégale unas gotas de agua oxigenada y, finalmente, añádele una cucharadita de bicarbonato de sodio. Luego mezcla los ingredientes y aplica en los dientes, como si fuera pasta dentífrica, por lo menos una vez al día. Los resultados te sorprenderán, como asegura el sitio, Belleza Excite.es.
Cepíllate los dientes con bicarbonato: El bicarbonato de sodio es en sí mismo, un excelente blanqueador. Basta con que apliques un poco de bicarbonato en tu pasta de dientes habitual, dos o tres veces por semana, para comenzar a obtener resultados, como dice el portal de Belleza y Moda de Univision.
Utiliza aceite de coco. Mezcla dos cucharaditas de aceite de coco, con 3 cucharaditas de bicarbonato de sodio y revuélvelo hasta que parezca una pasta dental regular. Utiliza la mezcla, varias veces por semana, para comenzar a ver resultados, como recomienda el sitio eHowenenEspañol.com.
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