¡Qué horror! Estaba leyendo un artículo de Amanda McGowan, publicado en el sitio HuffPost Style, acerca de lo sobrevalorado, que ella considera, que está el rasurarse las axilas, pues sugiere que, en realidad, esta práctica no se acostumbraba en el pasado y la sociedad no percibía que tuviera nada de malo no hacerlo, hasta que aparecieron los vestidos sin manga en 1914. Fue en ese momento, cuando el no tener vellos, se convirtió en un símbolo de sensualidad, como lo sigue siendo hasta ahora.
Ella cuenta, que el hábito de quitarse el vello de esa zona, se popularizó con la llegada de la compañía Gillette, quien introdujo el primer rastrillo en el año de 1915, así como otros productos para remover el vello. Algo que la autora considera, completamente innecesario, pues sugiere, que esto tiene que ver más, con una cuestión de estética que de funcionalidad.
Y es que para McGowan, hay muchas razones para no rasurarse: el vello es símbolo de fertilidad, ayuda a enviar feromonas para atraer a las personas con las que podrías tener química, ayuda a alejar a las bacterias que producen el mal olor, y por último, las mujeres con vello, han sido glorificadas por grandes artistas como Van Gogh, Egon Schiele, Modigliani y Pierr August Renoir.
Todas estas razones, han motivado a la autora, a no volverse a pasar el rastrillo por esa zona, e incluso, ha compartido una foto con sus lectores para que atestigüen que, verdaderamente ¡lleva días sin rasurarse las axilas! Y aunque, no la juzgo por ello –pues no sólo tiene muy buenos argumentos para defender su causa, sino que además, cada quien tiene el derecho a hacer con su cuerpo lo que desee— yo no podría dejarme crecer el vello en las axilas.
Quizás soy una persona, con la cabeza muy cuadrada, pero hay veces en las que prefiero seguir los estándares que impone la sociedad. Para mí, rasurase las axilas, es un acto de higiene y un símbolo de feminidad, por lo que no estaría dispuesta a dejar de hacerlo, por mucho que me hablen de los beneficios. Repito, no juzgo a las personas que decidan no rasurarse, pero, simplemente, no va conmigo, tener toda una "maleza" debajo de las axilas, pues siempre he pensado que se ve grotesco.
¿Tú qué crees?
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