Por ahí anda una moda que me tiene nerviosa. Me disgusta tanto que estoy segura de que las adolescentes de mi familia me van a tildar de vieja y quizá tengan razón, pero lo dudo. No es una cuestión de edad, es una cuestión de estética: ¡odio cómo se ven las camisas medio metidas en la falda o el pantalón!
Conste que me metí en grandes pleitos con mi mamá y mi abuela cuando me negaba a meterme la camisa. A mis hermanos y a mí nos llamaron de desordenados, desarreglados y hasta descuidados por llevar las camisas y camisetas por fuera. Era una cuestión de tradición. Yo no peleo con mis hijos por cuestiones de estilo, a menos que deban verse elegantes y quieran usar shorts o jeans.
Lo que estoy tratando de explicar, es que no soy lo que se dice inflexible con la moda. Pero me parece que la camisa llevada así se ve horrible. Además de que no favorece a nadie. Llama la atención hacia el área del torso, una zona en la que a menos que tengas abdominales de acero, es preferible que sea ignorada.
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La tendencia comenzó con los hombres, pero gracias al catálogo para este otoño de la cadena de tiendas J.Crew, que para muchas fashionistas es la biblia de la moda informal, muchas mujeres han comenzado a adoptarla.
Ahora, si decides que quieres seguir esta tendencia, la que más favorece a todo tipo de cuerpo, es la de llevar la camisa metida por delante y, por fuera por detrás, o medio salida a los lados, siempre y cuando sea de una tela muy liviana que caiga fácilmente. Yo jamás me la pondré. Ensayé en el espejo y me queda malísimo, pero además me parece que hace que la ropa se vea peor.¿Qué te parece?
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Imagen vía J Crew
