Pero ¡cómo no se me había ocurrido antes! las famosas "Gummy Bear" o gomitas de ositos, tienen la textura y la consistencia perfecta como para ser implantes de seno y son mucho más seguros. Al menos, eso es lo que indicó un reporte del Huffington Post, que dio a conocer que estos implantes son "lo último" en cuanto a operaciones para aumentar el busto se refiere. Pero no creas, que se trata de un implante realmente hecho por azúcar, o algo similar, sólo lo llaman así porque está hecho de un gel de silicona muy resistente que mantiene su forma, incluso si se llegan a romper.
Según este mismo medio, hasta se sienten igual a las gomitas de ositos, es decir, son suaves y fangosos, aportándole a los implantes un aspecto mucho más natural, en comparación con los implantes salinos. Y al parecer, para la tranquilidad de muchas mujeres, no representan ningún peligro para la salud ya que La FDA, recientemente aprobó el implante.
Y es que, a diferencia de otros implantes que corren el riesgo de romperse y regar el líquido que contienen, estas piezas tienen pocas probabilidades de hacerlo. Al menos, eso es lo que asegura el Dr. Grant Stevens, un cirujano plástico de California que afirma que el nombre de "Gummy Bear", viene de la similitud que el implante tiene con las gomitas de oso, en el sentido de que si los partes a la mitad, el líquido que tienen dentro no se riega, sino que se queda firme.
En fin, aún cuando la FDA considera que estos implantes son seguros, yo no me confiaría del todo. Me esperaría a ver cómo evolucionan en unos años más, porque ya ves lo que pasó recientemente con los implantes franceses PIP, que tuvieron que ser retirados del mercado y hasta ser extraídos de los cuerpos de miles de mujeres, debido a que estaban hechos con silicona industrial y su mala calidad los hacía objeto de romperse con facilidad. Algunos investigadores, incluso encontraron una relación entre los químicos de estos implantes y el cáncer de seno ¡así que ya te imaginarás el miedo que invadió a todas las mujeres que tenían dichos implantes!
No estoy en contra de las operaciones estéticas, pues me parece que si tienes la oportunidad de mejorar alguna parte de tu cuerpo para sentirte bien contigo misma, tienes todo el derecho de hacerlo. Pero hay que ser bastante cuidadosas con este tipo de procedimientos. Hay que informarse bien de qué está hecho el implante que te están poniendo, cuáles podrían ser las consecuencias de la operación y sobre todo, asegurarte de que la intervención quirúrgica, será realizada por un médico certificado.
¿Tu qué opinas sobre estos nuevos implantes?
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Imagen vía Rubí Florez/flickr