Raúl de Molina, mejor conocido como “El Gordo”, estuvo como invitado de Clarissa Molina en Clarissima, su proyecto de YouTube, en el que el presentador de El Gordo y La Flaca se sinceró sobre sus 31 años trabajando en el mundo de la televisión, de los cuales 27 han sido de la mano del programa de Univision. Al igual habló de los millones de dólares que dicen que tiene.
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La conversación con Rauli, como también es conocido, se llevó a cabo días después de que él y Lili Estefan recibieran su estrella en el Hollywood Walk of Fame y en medio de los rumores que existen sobre el fin de la emisión. Esos rumores llevan meses rondándolos e incluso él ya hasta bromas ha hecho sobre que no sabe si el día de mañana seguirá teniendo trabajo.
Raúl de Molina habló sobre esos temas, así como también de las diferencias que ha tenido con la actual producción del programa, la cual ya no le permite hablar como él lo hacía en el pasado. Anteriormente solía contar con lujo de detalle diversos aspectos de su vida personal, como cuando hablaba de Mía, su hija, quien por un tiempo fue muy popular y querida entre la audiencia. Con el pasar del tiempo se convirtió en blanco del bullying, algo de lo que también habló durante su conversación con Clarissa.
¿Es verdad que Rauli es millonario?
El carismático presentador cubano aprovechó la plática que tuvo con su compañera de El Gordo y La Flaca para hablar de varios temas, incluida la supuesta fortuna que tendría y de la que tanto se habla en las redes sociales. Es que es verdad, es alguien que prácticamente ha recorrido todo el mundo y cuando viaja le gusta dormir en los mejores hoteles y comer en los mejores restaurantes. Pero … ¿es verdad que es millonario? Él mismo le respondió a Clarissa:
“Si tuviera todos esos millones que dicen que tengo, en las redes sociales o en Wikipedia, ¿tú crees, Clarissa, que yo estuviera yendo a El Gordo y La Flaca todos los días? Yo no necesito a la televisión, a mí me gusta viajar, disfrutar, estar con mi familia, comer bien”, se sinceró el presentador sobre lo que se dice de él.
Reveló qué pasará cuando el show llegue a su fin.
Aunque Raúl no tiene en mente retirarse y dejar la televisión, también es consciente de que el fin de El Gordo y La Flaca puede llegar en cualquier momento, por lo que compartió con su compañera lo que le gustaría hacer de su vida cuando ese día llegue.
“Ojalá que pudiera viajar alrededor del mundo. Inventaré algo para tratar de hacer algo, tanto sea en televisión o en algún lugar, pero también me encantaría viajar, disfrutar. He estado en 109 países”, compartió Rauli sobre lo que se podría venir para él tras el retiro.
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Es consciente de que tarde o temprano su show saldrá del aire.
La televisión es una industria que ha cambiado muchísimo con el pasar del tiempo y Raúl de Molina lo sabe más que nadie. Sabe que el show que encabeza no será algo que dure toda la vida, sobre todo si tomamos en cuenta que ya lleva 27 años al aire y que no hay día en que no se hable de su supuesta cancelación.
“Va haber un último día de El Gordo y La Flaca. Ya llevamos 27 años y algún día tiene que terminar, pero le va bien, el show gana mucho dinero, yo no sé. Estoy feliz trabajando en televisión”, continuó.
Habló de sus diferencias con la producción.
A pesar de que el presentador cubano se diga feliz con lo que hace a cuadro, también es verdad que en más de una ocasión ha externado su inconformidad con el rumbo que ha tomado el show. Dice que ya no es lo que fue en sus orígenes, cuando él y Lili aprovechaban para contar sus anécdotas diarias. Ahora solo se limitan a contar noticias que ya se dijeron en otro lado.
“Me peleo diariamente por decir la verdad. Si en el programa hay una historia que yo creo que no debe estar ahí y que no merece la pena que tú la pongas, yo lo digo en el aire y se enojan conmigo y hay alguna gente que igual le va a caer mal eso, pero a otra gente le va a caer bien”, detalló Raúl en otro fragmento de la conversación.
También habló del bullying del que es víctima Mía, su hija.
Anteriormente Rauli solía usar la pantalla que le ofrecía El Gordo y La Flaca para contar algunas historias de su vida con Mía, su hija, quien en la actualidad se está abriendo su propio camino lejos de la industria de la televisión tras ser víctima del bullying.
“Llegó un momento, a los 16 años, que ella vino un día al show. Hizo un par de chistes, la gente se le cayeron encima, Mía cerró su cuenta de Instagram y dijo que no quería hacer eso”, declaró sobre los motivos que llevaron a su hija a alejarse de la televisión y a comenzar su propio camino en el mundo de la moda, una industria que le apasiona.
