Ya sea porque te da vergüenza o lo veas como algo normal, hay ciertas cosas que suceden con tu cuerpo –o que haces con él– que debes conversar con tu ginecólogo. No es que tengas que correr a la sala de emergencia si te ocurren, pero mantenlas presente en tu próxima visita.
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Imagen vía Corbis
Olores allá abajito o manchas en tu ropa interior
Esto no quiere decir necesariamente que tengas una infección, pero como lo dice la sabiduría popular: "Es mejor prevenir que lamentar".
Cólicos de muerte
Todas hemos sentido esos dolores menstruales, pero si los cólicos te tiran al piso, literalmente, puede que exista una razón de cuidado.
Enfermedades en tu familia
Por lo general, siempre te lo preguntan, pues es necesario que cuentes si hay enfermedades hereditarias en tu familia, tales como el cáncer.
Problemas de acné o dolores de cabeza
Déjalo saber, pues podrían ser ocasionados por las pastillas anticonceptivas. Si las tomas, asegúrate también de mencionar cualquier problema de hipertensión sanguínea, ya sea tuyo o hereditario.
Molestias en la intimidad
Algunas veces, un poco de dolor no es para alarmarse, pero tu médico te puede ayudar a determinar si algo anda mal. Convérsalo, y mejora enormemente tu experiencia en la cama.
Tus hábitos de pareja
Recuerda que el ginecólogo no está allí para juzgarte, sino para mantenerte saludable. Así que, coméntale sobre tu vida en la intimidad: cuántas parejas, de qué género, si tienes encuentros casuales… Bueno, ya entiendes la idea.
Si no te protegiste
Así haya sido solo una vez, asegúrate de mencionarle al doctor si no utilizaste un preservativo.
Cambios importantes en tu periodo
Que se demore en llegar un par de días no es preocupante, pero déjale saber al médico si se acorta o si no te llega un mes.
Vicios
Aunque no lo creas, el cigarrillo, el alcohol y las drogas pueden afectar hasta tus partes íntimas. Por eso, no dudes en comentarle acerca de tus vicios durante la próxima visita.
Tu alimentación
Si andas en la dieta de una lata de atún al día o, en general, si sientes que empiezas a sufrir algún trastorno alimenticio, esto puede afectar la salud de todo tu cuerpo.
