15 Preguntas y las respuestas que evitarán que tu hijo sea obeso

Mis dos niños son delgados. El menor lo es tanto, que un día le pregunté al pediatra si era normal. Mirándolo a los ojos el doctor le contestó (a él, no a mí): "No te preocupes Tomás, cuando crezcas verás como la gente querrá ser como tú". Y es que un niño rellenito puede terminar siendo un adulto obeso. Mira la galería de fotos que allí te cuento qué hacer para evitar la obesidad infantil.

Lee más en ¿Qué más?: 12 Divertidas #ActividadesFamiliares para el fin de semana

Para recetas saludables que encantarán a tus niños, visita mi blog de cocina.

Imagen vía Corbis

¿Qué es el sobrepeso?

phsrrzdyww1-1.jpg
Corbis

Se considera que un niño tiene sobrepeso cuando aumenta su grasa corporal en comparación con otros indicadores como masa muscular. Si el aumento es constante, puede transformarse en obeso.

¿Por qué tu niño aumenta de peso?

phpxrk3d4w1-1.jpg
Corbis

Es natural: está creciendo. Si el aumento de la grasa corporal y tejido adiposo es exagerado, puede ser que estés frente a un caso de obesidad infantil.

¿Cuáles son las señales de alerta?

php0170eg41-1.jpg
Corbis

Si tu niño come alimentos ricos en grasa, sal y azúcar, como los postres, golosinas, helados y frituras, estará consumiendo muchas calorías y poco nutrientes. Si, además, tiene una vida sedentaria y no hace ninguna actividad física, está en riesgo de sobrepeso y obesidad.

¿Cómo saber si mi niño es obeso?

ph0wk6wnoc1-1.jpg
Corbis

Si tu niño está rellenito, pregúntale a tu pediatra para que determine si es un caso de obesidad.

¿Cuándo se considera que un niño es obeso?

phmikha5mo1-1.jpg
Corbis

Cuando su peso corporal está 20 por ciento por encima de su peso ideal según la edad, talla y sexo.

¿Qué hace que mi hijo sea propenso a la obesidad?

pha3ngwqgw1-2.jpg
Corbis

Historia familiar, factores genéticos y enfermedades endocrinas, consumo de comida chatarra y de porciones demasiado grandes, consumo de carbohidratos refinados y de grasas saturadas.

¿Qué hago si mi hijo es obeso?

phkm4kgpkc1-2.jpg
Corbis

Consulta con tu pediatra. Seguramente convendrá un cambio de estilo de vida que incluya un programa de alimentación saludable y actividad física que le permita quemar grasa.

¿Si mi hijo es obeso tengo que ponerlo a dieta?

ph3ffk628s1-2.jpg
Corbis

Sí y no. Fíjate que en la foto anterior me refiero a programa de alimentación, no a dieta. Obviamente tendrá que aprender a comer diferente. Pero no es bueno hablar de dieta con los niños para no generarles ansiedad.

¿Cuál es el tamaño adecuado de las porciones para mi niño?

phw4frsmck1-2.jpg
Corbis

No hay fórmula mágica, cada niño es único y además también el apetito de niños y niñas es diferente. Pero en general se recomienda que consuman 60 por ciento de carbohidratos, 20 por ciento de proteína, 15 por ciento de grasa y 5 por ciento de vitaminas y minerales.

¿Qué debe incluir un desayuno saludable?

phvr7fzg0s1-2.jpg
Corbis

Lácteos (leche, queso o yogur), proteína (jamón, huevos) y fruta fresca.

¿Qué debe incluir un almuerzo saludable?

phpbveldwk1-2.jpg
Corbis

Proteína animal (carne, pollo o pescado), proteína vegetal (verduras, quínoa, lentejas), carbohidratos (arroz, papa, yuca), fruta.

¿Qué debe incluir una cena saludable?

phd1db33sw1-2.jpg

Al igual que el almuerzo, debe incluir proteína animal, proteína vegetal, carbohidratos y fruta.

¿Qué alimentos debo evitar para que mi hijo no sea obeso?

phzfntjxfk1-2.jpg
Corbis

Debes limitar que consuma harinas blancas y alimentos procesados y refinados, así como grasas saturadas y sodio. La lista incluye galletas, pasteles, gelatinas, golosinas, jugos de cajita, sodas, comida chatarra, tocineta, pizzas y salsas con colorantes.

¿Qué otros hábitos debo evitar?

php839k8ys1-2.jpg
Corbis

Usar la comida como recompensa, tomar gaseosas, ponerle sal a la comida en la mesa, las meriendas frente al televisor y la computadora.

¿Puedo prevenir la obesidad de mi hijo?

ph6dxhkx4o1-2.jpg
Corbis

Por supuesto. La clave está en una combinación de alimentación balanceada y actividad física. Y como el ejemplo es la mejor lección, conviene que la lucha contra la obesidad sea un asunto de familia, que empiece por ti y tu pareja.