No es raro que me digan a menudo que estoy loca. Mis ideas sobre la vida no son particularmente tradicionales y confío más en mi instinto, que en lo que "se debe hacer". Aunque me equivoco, como todo el mundo, hasta ahora en lo que se refiere a la crianza de mis hjos, las cosas me han salido bien (toco madera para que siga así). Sin embargo, justamente por decisiones en lo que se refiere a ellos, me he encontrado con cejas levantadas de mi mamá, mi suegra y hasta de mis amigas del alma.
Un ejemplo específico es el caso de la dormida. Yo amo dormir con mis hijos y lo hago cada vez que puedo. Adoro sentirlos relajados y vulnerables entre mis brazos. Sentir sus cabecitas pesadas, sus cuerpitos en reposo. Es algo que me da paz y felicidad. Y ¿sabes qué? No está mal. Una experta española anda por el mundo explicando lo que siempre he intuído. ¡La amo!
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María Berrozpe, doctora en Biología, autora del Debate Científico sobre la realidad del Sueño Infantil, experta de la Pedagogía Blanca y del blog Reeducando a Mamá, asegura que la idea de que dormir con los hijos es malo, nació de un error de "la ciencia del siglo pasado, que convirtió una costumbre establecida culturalmente, el sueño en solitario de nuestros hijos, en una cuestión de salud y ciencia". Y añade:
Los defensores de este método siguen considerando que el niño que a los seis meses no es capaz de dormir en solitario toda la noche tiene una enfermedad llamada "insomnio infantil por hábitos incorrectos" que si no se soluciona le producirá problemas de sueño en el futuro. Pero hoy está perfectamente demostrado que el sueño en solitario no es imprescindible para tener un sueño saludable.
Es más, los expertos hoy en día, incluyendo al famoso Dr. Farber, quien popularizo el sistema de dejar llorar a los bebés para que se acostumbren a dormir, dice que el llamado "colecho", es decir, compartir la cama con los niños, no tiene nada de malo. El asunto ahí es qué es lo que los padres quieren. Si uno necesita dormir solo para descansar, pues habrá que acostumbrar a los niños. Si no, pues ningún chico lleva al padre o a la madre a la universidad a que duerma con él. Nadie.
Con eso en mente, te cuento que yo nunca dejé llorar a mis hijos, ni por dormir, ni por dejar el pecho. Eso sí, no les di chupón, justamente para evitar ese drama. Ambos dejaron de lactar a eso de los dos años. Mi hijo mayor duerme solo toda la noche, sin problemas, desde los 9. El chico de 8, aún tiene pesadillas de vez en cuando.
Los dos están bienvenidos en nuestra cama cuando quieran o yo voy a dormir con ellos. Mi esposo es de sueño ligero y pasa épocas de insomnio, por lo que a veces es mejor evitar interrupciones. Mi hijo mayor me mira horrorizado cuando le menciono en chiste la idea de dormir con él. Solito, sin presiones ni dramas se independizó.
Ahora, reconozco que tengo suerte. Yo no tengo problemas de sueño y duermo mejor abrazada. Hay gente que no soporta ni que la toquen. Por eso, cada familia debe hacer lo que le funcione. Sigue tu intuición y resuelve según tus necesidades. Yo creo que es terrible obligar a un niño asustado a dormir solo, únicamente por que "es lo correcto". Eso sí: Con los bebés de menos de tres meses hay que tener mucho cuidado. Lo mejor es tenerlos en una cunita cerca, o comprar uno de esos separadores en las camas.
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