El sabor del tamarindo me remonta a la época de mi infancia y quién iba a decir que esta planta tiene propiedades milagrosas para hacernos perder peso.
Hasta la fecha, la consumo en los famosos dulces de tamarindo, pero no es así como adelgaza, es preferible ingerirlo en su estado natural o en combinación con el agua, porque se incrementa la potencia de las propiedades. Las que te ayudarán a reducir los números de tu báscula. Cuando sepas porqué, saldrás corriendo a comprar mucho tamarindo.
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Esta planta es de origen tropical, viene de algunos países de Centroamérica, Asia y África, pero ya la venden en casi todo el mundo. Los elementos nutritivos del tamarindo son únicos, y ni qué decir de su sabor.
Para empezar esta planta tiene muchísima vitamina C, lo que se convierte en un poderosísimo antioxidante que ayuda al buen funcionamiento de los nutrientes, y el proceso de desecho digestivo.
Por otro lado, el tamarindo contiene potasio que es buenísimo para ayudarte a eliminar líquidos, en otras palabras para que vayas al baño mucho más seguido. Tal cual, un diurético natural.
Si a esto, le agregamos que contiene mucha fibra, pues ¡ya ganamos! Estas propiedades dicen los expertos de A perder peso, te ayudarán a eliminar más rápidamente las grasas y los azúcares de tu cuerpo y sobre todo, te ayudarán a agilizar el movimiento intestinal.
La forma de consumirlo es importantísimo. Te decía al principio que a mí me encantan todos los dulces de tamarindo, pero obvio, están mezclados con azúcares o con sustancias químicas. La mejor manera de consumir esta planta, es en su estado natural, como podría ser en un agua fresca, o un té.
Cuando pequeña lo pelábamos y lo comíamos a mordidas y aunque es un poco agrio, ¡nos encantaba!
Te comparto mi receta para una sabrosa agua fresca de tamarindo:
En una olla pon a hervir dos puñitos de tamarindo sin cáscara, con 3 tazas de agua.
Una vez cocidos, deshuésalos y coloca la pulpa que quedó en la licuadora y vierte también el agua donde los herviste. Agrega endulzante al gusto. Licúa y cuela la mezcla y apachurra lo que queda en el colador, hasta que salga todo el agua.
Revuelve y sirve ¡con mucho hielo!
Imágen vía Thinkstock,Corbis Images
