Ahora resulta que para poder lucir un bikini o un conjunto de lencería tenemos que estar prácticamente en los huesos.
Por lo menos así es como lo promueve la exclusiva tienda La Perla, conocida por sus exquisitos articulos de lenceria, trajes de baño y pijamas. Una tienda que decidió exhibir en uno de sus aparadores en Nueva York, un maniquí que luce extremadamente delgada y hasta con un par de costillas salidas…¡Ver para creer!
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Una compradora ofendida tomó una fotografía y la subió a su cuenta de Twitter lo que ha puesto en el candelero a la tienda.
Los comentarios no se hicieron esperar y las opiniones calificaban este hecho como dañino, irresponsable, inaceptable y hasta de "una delgadez de miedo". Lo más triste del asunto es que esas jovencitas que buscan lucir como de revista, ahora en vivo y a color podrían ver las mismas imágenes de modelos extremadamente delgadas, en los maniquíes de sus tiendas favoritas.
Por supuesto que se tomaron cartas en el asunto, después de la lluvia de críticas y comentarios en contra de esta práctica de mercadotecnia la tienda decidió retirar el maniquí de forma definitiva. Tal vez así se callen las críticas, pero tampoco se trata de crucificarlos porque ellos no son los únicos que han estilizado al máximo la figura femenina para sus propositos de ventas.
Mi abuela decía: para gustos, colores. No voy a negar que sí existen mujeres con una figura como el maniquí y que además tiene muy bien controlada la parte alimenticia y de consumo de grasas, pero también es cierto que muchas mujeres toman decisiones desesperadas para lograr esos estándares que en su gran mayoría no son ni saludables , ni reales.
Si hubieran puesto un maniquí con sobrepeso y tal vez con una pancita protuberante ¿crees que habría la misma cantidad de quejas, se haría el mismo escándalo o es sólo en contra de la delgadez extrema? Yo creo que el punto no es si eres flaca o gordita, lo importante es qué tan sana eres y qué tan bien te sientes con o sin bikini.
Imagen vía Michael Rudoy/Twitter
