Es bien conocida la vanidad de los adolescentes, preocupados por el cabello, la figura, la moda y el rostro. Como madres nos toca siempre solucionar sus "problemas mortales" como un barrito en el cachete, o un cabello maltratado o simplemente la frustración de unas libritas de más, con eso se les acaba el mundo.
Pero, ¿qué tal si tu hijo de la noche a la mañana se despertara con un tumor en la cara que con el paso del tiempo crece y crece hasta deformarlo por completo? Este es el triste caso de una adolescente en Haití de tan solo 16 años y que ha vivido durante cuatro años con un tumor en el rostro que llegó a pesar cuatro libras…
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El tumor de esta jovencita fue creciendo tanto que su carita comenzó a deformarse hasta el punto que cambio la posición del ojo, dejándola casi ciega de un lado. No lo van a creer, pero el tumor fue identificado por los médicos locales desde que Hennglise Dorival tenía 12 años, pero ellos se negaron a extirparlo ya que decían no contar con el equipo necesario para llevar a cabo una cirugía tan seria y extensa y pretendían estudios más profundos.
La deformación de Hennglise ya estaba afectando su salud por lo que la madre decidió exponer el caso a la luz pública y fueron los miembros de "Operación Sonrisa", una organización no lucrativa que proporciona cirugías gratis para reparar labios leporinos en niños, los que le ofrecieron ayudarla, costeando los gastos de transporte a los Estados Unidos y, por supuesto, la cirugía.
El doctor que operó a la joven a principios de este mes asegura que ha sido el tumor más grande que ha removido y que fue originado por un problema dental. Lo más triste del caso es que el tumor era relativamente pequeño pero creció monstruosamente porque nadie supo de qué se trataba.
Hennglise ahora se acostumbra a su nueva imagen, le faltan un par de operaciones, pero desde el mismo día de la cirugía decidió dejar de usar la pañoleta que cubría su rostro cada vez que salía a la calle. ¡Esa es la actitud!
Imágenes vía Thinkstock, Operation Smile
