Ricky Martin se ganó el respeto del público, de la crítica y de la industria con su talento e incluso acaba de anunciar un show permanente en Las Vegas. Pero todavía tiene un hueso duro de roer en casa: sus hijitos Matteo y Valentino, que no siempre se rinden a los encantos de su superfamoso padre y le dicen cuando no les gusta una canción o un baile.
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Nos encantan los gemelitos de Ricky Martin y cómo se integran en su vida con muchísima naturalidad gracias, claro, al gran trabajo del puertorriqueño como padre.
Pero, si bien una estrella tiene que acostumbrarse a recibir opiniones muy halagadoras y no poder distinguir quién está diciendo la verdad, la familia está para poner los pies en la tierra y decir las verdades aunque sean un jarro de agua fría.
Pese a lo pequeñitos que son todavía, Matteo y Valentino ponen en práctica su sinceridad con Ricky, quien en una rueda de prensa en Las Vegas explicó a MamásLatinas: "No sabes lo críticos que son mis hijos. Dicen: 'Papá, esa canción no me gusta. Ese movimiento tampocomo me gusta'. Muy fuerte. Yo tenía crítica de mis padres y ahora tengo de mis hijos", dijo el cantante.
Pero igual que señalan lo negativo, también lo positivo. "Se lo disfrutan, bailan mis canciones y cantan mis canciones también".
Valentino y Matteo ya saben cuál es el rol que tiene Jwan Yosef en la vida de su padre y que habrá boda pronto, aunque el cantante aseguró que todavía no hay fecha concreta. "No se ha hablado todavía. Cuando se hable se dirá", aseguró.
"Todo lo que hago con conciencia, libertad y muchas transparencia. Y mis hijos lo saben", concluyó el cantante de "La copa de la vida".
Imagen vía Ricky Martin/Instagram
