Saint –el segundo hijo de Kim Kardashian y Kanye West, y el mayor de los varones– estuvo de cumpleaños este fin de semana y su famosa mamá le organizó una fiesta apoteósica inspirada en el mundo de los dinosaurios, que estuvo tan, pero tan realista, que los presentes se deben haber sentido dentro de una máquina que los depositó en una excavación arqueológica muy, pero muy profesional. ¡No vas a creer cómo se veía todo! Además, tuvo invitados espectaculares, comenzando por sus propios hermanitos.
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Kim Kardashian tiró la casa por la ventana para celebrar a su adorado Saint. Cuando veas las fotos y videos que publicó en sus redes sociales vas a sentir cuánto amor le puso al festejo del mayor de sus varones y el hombre que realmente le ha robado el corazón para siempre. Todos los detalles fueron cuidados al máximo.
Entre los invitados de honor estuvieron los hermanitos del cumpleañero: North, Chicago y hasta el bebé Psalm West Kardashian, así como su prima True y muchos más niños. Eso sí, después de que veas todo lo que se puede hacer en una fiesta de dinosaurios, lo que te va a dejar sin aliento es el recuerdito que se llevaron los invitados. ¡Increíble!
La entrada era fascinante.
Entre la vegetación y el humo creado por el hielo seco seguro que era fácil para los niños imaginar que estaban dentro de la selva.
El pastel era una belleza.
¿Será que Saint es fan de los M&Ms? Esos deliciosos dulces recubiertos de chocolate y capitas de colores son la delicia de muchos.
La ternura de los niños fue una parte hermosa de la fiesta.
El amor y besitos que le dio durante la fiesta Chicago a su hermanito menor Psalm derritió a todos los presentes.
La primita True se veía concentrada.
La hijita de Kourtney Kardashian parecía más apegada a su Elmo que a cualquier dinosaurio, pero seguro que la pasó bien.
El ambiente era increíble.
Los invitados podían pedir sus bebidas en esta área, que llevaba el muy divertido nombre de "Jugo raptor", en referencia al dinosaurio Velociraptor.
La piscina de bolas era minimalista.
Los pequeños pasaron horas en esa piscina de bolas blancas, acentuadas con pelotas más grandes de color pastel.
Las niñas también tuvieron su espacio.
En una de las mesas había una estación para hacer "joyería jurásica". Las amiguitas de su hermana mayor North pasaron allí un buen rato.
De hecho, North fue una de las que más se disfrutó la fiesta.
La hija mayor de Kim Kardashian y Kanye West aprovechó todas las actividades y era una de las que llevaba la voz cantante.
Pasteles y café estaban disponibles.
Entre los dulces estaban los beignetes, un pastel horneado francés, favorito de las Kardashian.
Chicago está grandísima.
La más pequeña de las niñas de Kim Kardashian y Kanye West andaba con sus muñecos para arriba y para abajo.
Una de las actividades era hallar los dinosaurios.
También podían excavar la arena y encontrar "restos" de dinosaurios y otros animales prehistóricos.
Esa sonrisa lo dice todo.
Saint parece haber disfrutado su fiesta al máximo. No hay nada más satisfactorio para una mamá que ver esa sonrisota.
No podían faltar los lugares para las fotos.
Muchos de los invitados se tomaron hermosas imágenes en ese espacio, perfecto para Instagram.
Las máscaras de dinosaurio fueron un éxito.
Los niños se veían fascinados con la posibilidad de convertirse en dinosaurios por un ratito.
Otra actividad era hacer manualidades de dinosaurios.
Seguro que los que se sentaron a hacer mini domos aprovecharon para descansar de toda la locura.
Los excavadores podían contar un un súper equipo.
Al mejor estilo Kardashian, los accesorios eran de primera categoría. ¡Qué belleza todo lo que se pudieran llevar a casa!
Los pequeñitos también estaban protegidos.
Hasta los grandes deben haberse sentido como expertos en dinosaurios con todos los detalles de la fiesta de Saint.
¡Qué bellos están los hermanitos West-Kardashian!
Los hijos de Kanye West y Kim Kardashian se gozaron a lo máximo la fiesta del cuarto cumpleaños de Saint, el segundo de los hermanos y el primer varón.
El castillo de aire fue un éxito total.
Siguendo el gusto monocromático de los papás, había mucho blanco, pero con las huellas de los dinosaurios.
Pero poco puede superar los recuerditos.
Todos los invitados se llevaron zapatos de la marca Yeezys, que diseña Kanye West para Adidas. Los precios van de entre $200 a más de $1,000.
