En el 2008, Patti Murillo-Casa fue diagnosticada con cáncer cervical. Y aunque para muchos esto hubiera sido un "abrir de ojos", Patti le dio pie a decenas de malos hábitos alimenticos que, paradójicamente, la pusieron en riesgo de perder su vida. Lo impresionante del asunto fue lo que hizo esta ex oficial de NYPD para ponerle fin al problema. ¡Me quedé loca!
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Tres meses después de retirarse de su cargo como oficial, Patti Murillo-Casa enfrentó lo que sería su primera pesadilla: cáncer cervical. Pero la latina de 51 años dio una pelea como pocas. "Al sanarme del cáncer, comencé a comer lo que se me antojaba. Era mi manera de 'premiarme' por haber vencido la enfermedad". Sin embargo, esos hábitos la llevaron a ganar de peso rápidamente y, peor aún, a ser diagnosticada con diabetes tipo dos, colesterol alto y un porcentaje de vida que entristecía a cualquiera.
En vez de honrar su cuerpo, Murillo había debilitado más su salud poniendo en riesgo su vida. ¿Crees que se echó a morir? ¡Al contrario! Patti tomó el toro por los cuernos y aunque admite que al principio fue difícil, la ex policía decidió cambiar sus costumbres con el fin de recuperar la felicidad que había perdido.
"Empecé contando las calorías. 1,500 calorías divididas en seis porciones me ayudaron a deshacerme del peso. Incluso ahora sigo con ese plan", contó orgullosa. Más adelante Patti incorporó 15 minutos de ejercicios al día hasta completar maratones y carreras que, a decir verdad, vence como si fuera pan comido. En 14 meses, la mujer le ha dicho adiós a 113 libras. "Es una aventura, un proceso continuo de aprendizaje. No es fácil pero sigo motivada, sigo aprendiendo", cuenta la también bloguera de Heavy Girl to Healthy Girl.
De oficial de policía a atleta, corredora e instructora certificada de Zumba y spinning. ¡Eso es lo que yo llamo dedicación! Por donde lo veas, Murillo ha pasado buena parte salvando vidas y ahora le tocó el turno a ella. Definitivamente un ejemplo que todas, mujeres, madres, viejitas o jovencitas, debemos tomar.
Imagen vía Patti Murillo-Casa/Facebook, Huffington Post