Como futuros padres pueden optar por no averiguar el sexo de su bebé, o incluso si lo hacen, podrían decidir que en cuanto se refiere al cuarto del bebé prefieren olvidarse de los tradicionales rosados y azules y apegarse a algo a algo más neutral que pueda crecer con su niño. Pero los creadores de todas las cosas de bebé tienden a estar un poco obsesionados con el género, por lo que puede ser difícil equipar una habitación no tradicional o una habitación para múltiples de uno y otro sexo.
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Pero, con un poco de ingenio y enfoque, es posible crear una hermosa morada para tu bebé. A continuación encontrarás algunas ideas para ayudarte a empezar .
Imagen vía ProjectNursery.com
Elije los colores correctos
Piensa fuera de lo tradicional cuando se trate de elegir los colores. Ya te decidiste en contra del rosado y el azul, pero eso no significa que tengas que usar amarillo y verde ¿Qué te parecen gris y naranja, tonos de crema, menta y dorado o tonos tierra suaves?
Usa un tema... o no
No tienes que casarte con un tema, pero si lo haces, no tiene que ser todo o nada. Puedes crear un tema sutil adoptando un enfoque de inspiración antigua, como se ve en esta hermosa habitación de temática circense. Puede hasta tomar algunas piezas clave que realmente te encanten y simplemente incorporarlas a una habitación sin tema.
No te quedes corta
Lo que menos quieres es que la habitación de tu bebé sea una réplica de tu sala, así que, aun cuando decidas apegarte a paredes de color beige y ropa de cama marrones, asegúrate de hacerlo completo. Quieres que la habitación luzca como un lugar acogedor para un bebé, entonces presta atención a los detalles. Cuelga imágenes infantiles, coloca estratégicamente algunos muñecos de peluche, haz una esquina de juguetes o un rincón de lectura.
Ante la duda, sé audaz
Los niños son divertidos y no te puedes equivocar con una habitación que refleje eso. Así que si no se te ocurre un tema o una paleta de colores específica que te encante, solo sé audaz. No tengas miedo respecto a tus selecciones, después de todo, probablemente lo estés redecorando en pocos años. Y, por lo menos por un tiempo, tu bebé no tendrá opinión sobre el tema.
