Tú y yo sabemos que n__o hay nada más adictivo que un chip: de papas, de tortillas, ¡de Fritos!__ No se qué tiene la comida crujiente que es tan divina. Pero ¿te imaginas lo que engordaríamos si diéramos rienda suelta al deseo incontrolable de estar comiendo chips a toda hora?
Por eso desde que descubrí que se pueden hacer chips igualmente crujientes pero mucho más ligeros y alimenticios, puse manos a la obra. Fíjate en estos hechos con betabel o remolachas. No tienen ni una gota de aceite, apenas sal y pimienta y son deliciosos.
Con esta receta si no te puedo decir que sea rendidora. Las rebanadas de remolacha se encojen en el horno y se vuelven un "papelito". Pero el "trabajo" vale la pena porque tú y tu familia podrán quitarse el antojo por la comida crujiente sin grasa. Más saludable imposible.
Más de mis recetas en mi blog de cocina.
Imagen vía Enriqueta Lemoine
Con este color, tiene que ser saludable...
Ingredientes:
4 betabel (remolachas) sin tallo, lavadas y secas
sal
pimienta negra recién molida (opcional)
Receta sin complicaciones
Precalienta el horno a 300°F.
La perfecta excusa para comprar una mandolina...
Con una mandolina, rebana las remolachas finamente.
Con el papel pergamino ahorrarás tiempo y trabajo...
Cubre dos o tres bandejas de hornear con papel pergamino y dispón las rebanadas en las bandejas de hornear y agrega un poco de sal (y pimiento si quieres).
Del horno... a la boca mhmmmm...
Hornea por 30-45 minutos hasta que los bordes de las remolachas estén crujientes y las hojuelas luzcan secas. Retira del horno y deja enfriar. Una vez frías, las hojuelas de estarán súper crujientes. En mi casa no alcanzamos a guardarlas porque no podemos parar de comerlas.
