Si eres amante del café y lo preparas regularmente en casa, sabes que desechar los residuos es parte del proceso. Sin embargo, el hecho de que el café ya haya sido usado, eso no significa que sean basura. ¡Ay, diablos, no!, [Los posos de café usados se pueden reutilizar de muchas maneras. La verdad del asunto es que nunca son basura.
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Una vez que hayan cumplido con su deber de ayudarte a preparar la taza de café perfecta, puedes emplearlos como parte de tu rutina de belleza, para limpiar tu hogar o para absorber olores desagradables en ciertos lugares, por nombrar solo algunasn opciones de uso. E, incluso, si no quieres molestarte en reutilizarlos para ninguno de esos propósitos, no debes tirarlos porque también puedes usarlos en tu jardín o en tus plantas de interior. ¡Mira algunos de nuestros usos favoritos para los posos de café usados!
Con ellos puedes hacer un exfoliante corporal sencillo y económico.
Esta receta, en particular, requiere partes iguales de café molido usado, azúcar sin refinar y aceite de coco. Combina todos los ingredientes y mézclalos a fuego lento hasta que la mezcla se ablande. Una vez hecho lo anterior, pásalos a un frasco de vidrio y comiénzala a usar como un exfoliante corporal.
Úsalos como un exfoliante para el cuero cabelludo.
De acuerdo con Medical News Today, “aplicar café en el pelo puede ser una excelente manera de ayudar a reequilibrar los niveles de pH del cabello y el cuero cabelludo”. Frotar el café molido usado también puede, incluso, ayudar a eliminar las células muertas de la piel del cuero cabelludo.
Pruébalos en los ojos hinchados.
La cafeína hace que la sangre fluya al dilatar los vasos sanguíneos. Ese aumento del flujo sanguíneo puede ayudar a reducir la hinchazón alrededor de los ojos. Aplica una pasta de café molido fino alrededor de tus ojos, la cual puedes mezclar con un poco de café sin usar para obtener el máximo efecto. Deja reposar un rato y luego enjuaga. No frotes la zona, ya que la piel de alrededor de los ojos es muy delicada.
Hazte un baño para tus pies con los posos de café.
Guarda el café que no te termines y combínalo con los posos usados para darle un poco de amor a tus pies. Pon el café sobrante y los posos en una tina de agua tibia. A continuación remoja los pies y usa los posos para frotar la piel muerta. La cafeína puede ayudar a estimular el flujo sanguíneo y la circulación.
Son un excelente fertilizante.
Puedes usarlos para fertilizar plantas de interior y exterior. Lo que los hace excelentes para las plantas es que contienen nitrógeno, calcio, potasio, hierro y otros minerales que son buenos para el crecimiento de estas. También atraen gusanos y los gusanos son muy buenos para la tierra.
Son muy buenos para la composta.
Si haces abono tú misma, definitivamente no querrás tirar los posos de café usados. Agrégalos a tu composta. Algunas cafeterías, incluso, los regalan para que los compostadores puedan usarlos.
Mantiene a los gatos alejados de tu jardín.
Si no quieres que tu gato o cualquier otro felino haga sus necesidades en tu jardín, mezcla los posos de café usados con unas cáscaras de naranja y espolvorea en todas las áreas que quieras mantener libres de ellos. A estos animales no les gustan esos olores, por lo que lograrás mantenerlos muy lejos de tu casa.
Úsalos para absorber los malos olores en la nevera.
Los posos de café no solo huelen bien, también absorben los malos olores. Coloca los posos usados en un recipiente abierto en el refrigerador para que puedan absorber los olores causados por los alimentos en mal estado. Asegúrate de que los posos estén secos para que no se les haga moho.
Coloca un tazón de posos usados secos en un armario con moho.
Si tu armario huele a humedad, un recipiente abierto con posos de café secos ayudará a absorber el olor. Asegúrate de que estén secos porque los posos húmedos no pueden absorber los olores. Déjalos allí durante aproximadamente 48 horas y repite con una mezcla nueva, solo si es necesario.
Úsalos para limpiar tus ollas y sartenes.
Pueden ayudar a eliminar los restos de comida de las ollas y sartenes sin ser demasiado abrasivos. Simplemente espolvoréalos y luego frota tus ollas y sartenes como de costumbre. No obstante, no los uses en recipientes recubiertos de esmalte porque pueden mancharse.
Limpia tus tablas de cortar con ellos.
Si tienes tablas de cortar de madera, esparce un poco de tu café molido usado sobre ellas de vez en cuando y utilízalos para eliminar los olores con la ayuda de una esponja y jabón para lavar platos.
Úsalos para quitar el olor a cebolla o ajo de tus manos.
Dado que los posos de café son un excelente desodorante y exfoliante, mantén algunos junto al fregadero para que cada vez que piques cebolla o ajoo puedas usarlos para eliminar los olores de tus manos, mientras que al mismo tiempo eliminas la piel muerta.
Sirven para ablandar la carne.
El café tiene ácidos y enzimas que funcionan como ablandadores. Mezcla los posos de café usados y frota la mezcla sobre la carne al menos dos horas antes de cocinarla. Obtendrás una carne suave y tierna, mientras que el café molido se convertirá en parte de una sabrosa corteza en el exterior.
Repelen ciertos insectos y bichos.
A las babosas no les gustan, así que si tienes un problema de babosas en tu jardín, echa los posos de café usados al césped. Las hormigas tampoco son fans. Puedes esparcir una línea de 1 pulgada de café molido en áreas donde las hormigas son molestas o dentro de tu casa. Lo mejor de todo es que los residuos se pueden limpiar fácilmente con una aspiradora.
Repara rayones en muebles de madera.
Si tienes muebles de madera oscura que se han rayado, haz una pasta con agua y posos de café usados. Pon la pasta sobre el rasguño y déjala reposar durante unos 10 minutos, luego limpia con un trapo. La pasta de café debería haber oscurecido el color del rasguño. Repite si es necesario.
