Thalía está súper acostumbrada a ser una personalidad de televisión, pues sus primeros pasos artísticos fueron cuando apenas era una niñita. La diva mexicana surgió como una joven promesa en el grupo Timbiriche, pero su verdadero trampolín a la fama estuvo en las telenovelas mexicanas, donde ya era admirada por su belleza. Y aunque nos parezca que a sus 50 primaveras la cantante, actriz y empresaria está en su mejor momento, los años parecen no pasar por ella, como demuestran estas fotos de su transformación.
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Esta mexicana ha dejado claro que lo suyo es reinventarse y sobre todo mantenerse vigente entre el público juvenil, siendo un ícono de moda también para el público femenino que la sigue. La esposa del magnate discográfico Tommy Mottola no deja de ser noticia por su bello rostro, su cuerpo de revista y lo espléndida que luce en cada una de las alfombras rojas a las que asiste.
Revisando sus fotos del pasado notarás que sí ha cambiado considerablemente, pero que los años no le pasan factura a la estrella y madre de familia. Thalía se cuida muchísimo y para ella es un ritual hacer ejercicio, practicar yoga y llevar una vida saludable, entre otras rutinas que sigue para preservar intactos sus encantos. Mira estas fotos que demuestran su espectacular transformación a través del tiempo.
Thalía conquistaba con su dulce mirada desde que era una bebita.
Thalía nació el 26 de agosto de 1971 en la Ciudad de México. Es la menor de las cinco hijas de la empresaria Yolanda Miranda Mange, quien tuvo que sacar adelante a su familia tras la muerte de su segundo esposo, padre de la cantante y actriz. Mira lo bella que lucía la diva mexicana desde bien pequeñita.
Empezó a subirse a los escenarios desde que era una niña.
Hasta 1986 no le llegó la oportunidad que cambiaría su vida, pero dos años antes formó parte del festival infantil "Juguemos a Cantar", en el que con 13 años sorprendió no solo por sus dotes para bailar y cantar sino por su buena química frente a las cámaras. Su cabello ondulado le lucía estupendo al igual que su pinta de rockera.
Así lucía Thalía cuando entró a formar parte de la banda Timbiriche.
La cantante tenía 15 años cuando recibió la oportunidad de unirse a las filas de una de las bandas infantiles y juveniles más populares de México y Latinoamérica y realmente viendo esta imagen luce irreconocible.
El mechón rubio fue una de sus señas de identidad en Timbiriche.
Thalía vivió una de las mejores etapas de su vida al lado del resto de estrellas de la banda, integrada por Paulina Rubio y Eduardo Capetillo, entre otros. Para entonces, era habitual verla con su melena suelta y ese peculiar mechón en tono dorado en la pollina.
Fue coronada "Señorita Estrella" en 1989 y ya lucía su melena rizada.
A sus 18 años Thalía estaba por marcharse de Timbiriche para empezar su carrera como solista. En ese entonces ya lucía una figura increíble, que le ayudó a llevarse la corona en un concurso de su país.
En su primera telenovela a finales de los 80 sus looks eran bien diferentes.
Thalía ha demostrado siempre estar a la vanguardia en cuestión de moda y en 1987, con apenas 16 años, llamó mucho la atención con este peinado que luego acabaría triunfando entre las adolescentes.
De la época en que lanzó su primer disco en solitario solo conserva la sonrisa.
Ya era una cantante reconocida en América Latina cuando grabó su álbum "Thalía". Pero, viendo las fotos de su campaña de promoción cuesta creer que estemos hablando de la misma persona.
El rostro de Thalía era mucho menos afilado que ahora.
Así lucía con 18 años y no sabemos si es porque la foto no captó su mejor ángulo. Sin embargo, la cantante lucía más curvas que en la actualidad. ¿No crees?
La nariz de Thalía también ha sido objeto de muchos debates.
Además de tener un estilo muy diferente, los detractores de la cantante y actriz siempre la han criticado, especulando con que ha pasado muchas veces por el quirófano para hacerse retoques.
En esta foto con Evangelina Sosa está irreconocible.
Trabajaron juntas en la serie Luz y sombra y detrás de ese maquillaje se escondía una irreconocible Thalía. Siendo su etapa de juventud una de las más recordadas entre sus fans, gracias a sus primeros personajes en las telenovelas.
La cantante tuvo su etapa "flower power" cuando presentó 'Mundo de cristal'.
Fue su segundo álbum de estudio como solista, grabado en 1991. En aquel entonces ya le gustaba jugar con los cambios de look y apostaba por mostrar su lado más sensual.
Con "Marimar" sacó a relucir su lado más inocente y risueño.
Fueron los años en los que se ganó el título de reina de las telenovelas. En esa época se distinguió por su larga melena rizada peinada de medio lado y su piel lozana, además de una dentadura casi perfecta.
Thalía parecía otra mujer cuando interpretó a María Mercedes.
La actriz lucía muy distinta a como nos tenía acostumbrados y por eso nos resulta impactante ver cómo ha sido su metamorfosis a través de los años. Llevando su melena castaña rojiza y un peinado para la época que iba con su prototipo.
En su última telenovela sorprendió con un look más sofisticado.
Fue en 1999 cuando vimos brillar a la actriz en "Rosalinda" y entonces nadie se imaginaba que detendría su carrera actoral para volcarse en la música. Un año más tarde se casó con Tommy Mottola.
Aunque los años pasan si algo no cambia es su sonrisa.
Juega con sus cortes de cabello, como en esta imagen del 2003. Pero, Thalía siempre se ha destacado por buscar el lado positivo de las cosas y por esa hermosa sonrisa.
Antes de ser mamá seguía triunfando en el panorama musical.
Ya era una mujer casada con uno de los hombres más poderosos del panorama musical cuando seguía conservando una cinturita impactante. Aunque, su look era mucho más moderno y estilizado.
Los embarazos de Thalía le sentaron especialmente bien.
En lo personal estaba atravesando un momento de lo más agridulce porque si bien estaba en la dulce espera de su hijito Matthew Alejandro, en la recta final de su embarazo falleció su mamá. No obstante, Thalía realzó su hermosura con la pancita de su segundo hijo.
Para su estrella en Hollywood mostró su versión más fresca.
Thalía es una de las artistas de México más conocidas del mundo y el día que recibió su estrella en el Paseo de la Fama de Hollywood en el 2013 deslumbró a todos con un look muy sensual y su cabello más rubio de lo habitual.
Su rostro luce fantástico independientemente de la edad.
Así lucía el rostro de Thalía en 2014, cuando ya estaba consagrada como reina del pop latino. Sus bellas facciones acaparaban portadas de revistas junto a su incomparable estilo.
Thalía es una diva y nunca decepciona en las alfombras rojas.
Con este espectacular vestido se presentó en febrero de 2019 en la gala de Premio Lo Nuestro, el cual se celebró en Miami. La cantante lució más guapa que nunca y volvió a comprobar que no aparenta la edad que tiene.
Lucir espectacular sigue siendo su carta de presentación.
La diva se presentó en Premio lo Nuestro 2020 con su aspecto de muñeca de carne y hueso, enfundada en un atrevido vestido que dejó sin aliento a más de uno. Thalía representa un patrón de belleza para el que parecen haber roto el molde.
Thalía tiene un pacto con la eterna juventud.
Thalía mantiene su alma de niña intacta y aparte de haber sacado un disco de temas infantiles, la cantante y empresaria muestra en su día a día que la edad no es más que un número. La también actriz se proyecta divertida, fresca y siempre ingeniosa a sus 50 años, cumplidos el 26 de agosto.
Si Thalía dijera que tiene 20 años menos se lo creeríamos.
Mantenerse así de resplandeciente y diva en esta etapa de su adultez es un gran secreto de Thalía, que todas sabemos reconocerle. Más allá de los muchos arreglos que se hace y de los filtros, su pacto con la juventud le sigue haciendo efecto. ¡Cada día que pasa está más hermosa!
Llegó al quinto piso en todo su esplendor.
No es exagerado decir que Thalía está mejor que nunca a sus cincuenta años. Lejos de ocultar su edad, la diva celebró su cumpleaños enfundada en un enterizo y tacones al borde de la piscina, agradeciendo por todo lo que la vida le ha dado. Es un privilegio lucir espléndida como siempre sin que los años se noten.
