Se acerca el gran día. Las casas estás decoradas con calaveras y telarañas. De las ventanas pueden saltar en cualquier momento un zombie o un vampiro. Para los más chicos se trata sin duda de una de las celebraciones más anticipadas del año, donde esperan disfrazarse, divertirse y acumular la mayor cantidad de dulces posibles.
Sin embargo, no todo es tan inofensivo como parece. Lamentablemente en esta fecha suelen aumentar los accidentes relacionados con niños y adolescentes, tales como intoxicaciones, quemaduras o accidentes peatonales. Es por ello que diferentes agencias de salud del gobierno han recopilado una serie de recomendaciones para los padres, a fin de minimizar los riesgos mas comunes y disfrutar de un divertido y seguro Halloween.
Un disfraz de susto:
– Cualquier espada, cuchillo o accesorio que imite un arma, debe ser de plástico flexible, liviano y sin puntas filosas.
– No usar mascaras que puedan limitar la respiración ni ropas demasiados grandes que puedan inducir caídas.
– Usar sólo pinturas diseñadas para la piel que no sean tóxicas. Para evitar el riesgo de alergia, debe probarse primero en una pequeña área. No se aconseja usar colorantes de comida porque pueden ser difícil de quitar después.
Esa dulce tentación:
– Alimenta a tus hijos antes de salir, eso evitará que quieran comer cada dulce que cae en su bolsa y te dará tiempo de revisarlos para asegurarse que no están abiertos, dañados o se vean sospechosos.
– Sólo deja a tu hijo comer dulces que mantengan su empaque original intacto. Comer dulces caseros de desconocidos no es una idea segura.
-Limita el número de dulces que tu hijo puede comer en un solo día.
Cuidado por dónde caminas:
– Nunca dejes a tu hijo caminar solo. Es preferible que los niños anden en grupos y siempre acompañados de un adulto.
– Enséñale a los niños que deben caminar y no correr cuando van de casa en casa. Tener especial cuidado con escaleras ya que los disfraces pueden entorpecer la vista y el equilibrio.
– Hay que tener mucho cuidado al cruzar la calle. Lamentablemente existen muchos casos de peatones atropellados la noche de brujas.
– Nunca dejes caminar a tus pequeños con velas encendidas. Pelucas y otros accesorios pueden ser altamente inflamables.
La prevención es definitivamente la clave, por lo que lo más importante es que lo padres estemos atentos a cualquier situación que pueda representar peligro. Para los más pequeños será cuidar de que no se traguen la arañita de decoración mientras que para los grandes será evitar que se me emocionen más de la cuenta durante su recorrido y se metan en problemas con los vecinos. En todo caso, desde aquí te deseamos una muy divertida, espeluznante pero sobretodo "segura" celebración.
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