Cada vez son más las mamás que usan un portabebés en vez del cochecito, o una combinación de los dos. Y tiene sentido. A veces conviene más el cochecito, pero en muchas otras ocasiones lo ideal es llevar al pequeño en un portabebés por las muchas ventajas que ofrece, incluyendo estas:
1. Fomentan la vinculación afectiva entre madre e hijo durante el "cuarto trimestre". En los primeros tres meses de vida de tu hijo es muy importante darle esa cercanía que aún necesita. Le confortarán tu calor corporal, tu olor y el ritmo de tu respiración. Además, el movimiento de estar en tus brazos o en un portabebés le recordará estar en tu vientre.
2. Puedes tomar de la mano a tus otros hijos. Uno de los mayores retos para una mamá con un bebé y otros hijos pequeños es salir de la casa con ellos, aun para actividades básicas como ir al supermercado o al parque. Un portabebés te permite tener las manos libres y agarrarte de la mano de tus otros hijos. Hay una gran selección de portabebés y algunos de los de modelo mochila, que puedes usar hasta los 2, 3 y 4 años, tienen un cojín, como este de Ergobaby, que puedes comprar aparte para los recién nacidos.
3. Es más fácil viajar en transportación pública. No es nada agradable subir y bajar las escaleras del metro o ir en autobús con un cochecito, pero con un portabebés es casi como si estuvieras sola. No tienes que llevar nada extra ni preocuparte por dónde ponerlo. Aun cuando vas en tu propio auto, no tienes que luchar con el cochecito para que quepa en el maletero del coche y te deja ese espacio libre para las compras.
4. No tienes que renunciar a actividades que siempre te han gustado. Un ejemplo es el senderismo. Obviamente no puedes llevar a un bebé de excursión en un cochecito, pero sí lo puedes llevar pegado a ti en un portabebés. Es una buena opción para eventos donde hay mucha gente, como en un festival de música, y quieres mantener a tu hijo cerca y evitar tener que maniobrar un cochecito entre la muchedumbre. El modelo Ergobaby Four Position 360 te permite llevar a tu hijo en cuatro posiciones, incluso en la espalda.
5. Es más fácil ir de compras. Si no tienes a tu bebé en brazos y no tienes que sacar el cochecito, puedes entrar y salir rápidamente de las tiendas, y tienes las manos libres para agarrar productos o sacar la cartera para pagar. Algunas mamás usan el asiento de seguridad para transportar al bebé y lo ponen en el carrito de compras, pero esa opción te deja muy poco espacio en el carrito y no es la más segura. Y las mochilas portabebés de Tula, que puedes usar mientras pese de 15 a 45 libras, y Carry On Multi-Pocket Carrier de Infantino, para niños de 8 a 40 libras, vienen con bolsillos para llevar artículos esenciales como llaves o tarjetas de crédito, si quieres andar sin cartera.
6. Si amamantas a tu bebé, lo puedes hacer con algunos de los portabebés. Si no sabes cómo hacerlo, hay muchos grupos de mamás que utilizan portabebés y ofrecen asesoramiento gratuito sobre su uso. Ellas te pueden enseñar todos los trucos, como por ejemplo, cómo amamantar a tu hijo mientras está en el portabebés. Y cuando no lo estés usando, algunos modelos, como el Boba Wrap te sirven como una manta si quieres taparte mientras amamantas en público.
7. Te ayudan a evitar que el bebé pase demasiado tiempo sobre la espalda. Hoy en día se recomienda que los bebés duerman boca arriba para reducir el riesgo de muerte súbita del lactante, pero durante el día debes procurar que no pase demasiado tiempo sobre la espalda, ya sea en el piso, en el cochecito o en una silla, para evitar aplanamientos en la cabeza. Puedes ponerlo boca abajo cuando esté despierto, cargarlo en brazos o ¡usar un portabebés!