El perfeccionismo: Un mal que puede arruinar tu salud, tu dieta y tu felicidad

¿Sabías que el perfeccionismo puede aumentar los riesgos de muerte y empeorar la salud física y mental? En los últimos años se han realizado numerosos estudios acerca del perfeccionismo y la salud, y muchos de ellos parecen indicar que una actitud perfeccionista no siempre es buena para la salud.

Si tienes una actitud perfeccionista para mantener una buena dieta y controlar la diabetes, por ejemplo, es posible que el perfeccionismo te dé resultados positivos. Pero si vives constantemente tratando de alcanzar perfección en múltiples aspectos de tu vida, entonces el perfeccionismo podría ser nocivo para tu salud.

Lee más en ¿Qué más?: Esta es la mejor herramienta para tener una vida sana y llena de amor

Todavía los psicólogos y científicos no tienen conclusiones absolutas acerca de por qué el perfeccionismo afecta la salud de maneras negativas. Sin embargo, muchos de ellos piensan que el perfeccionismo afecta la salud de las siguientes maneras.

El perfeccionismo causa estrés y ansiedad. Muchas personas perfecconistas viven en un estado de estrés y ansiedad constante. Sienten una necesidad extrema de ser perfectas, pero esa perfección no se alcanza nunca. Se enfocan en esconder lo que consideran sus "defectos". Este estado constante de estrés y ansiedad tiene consecuencias graves en la salud, a corto y a largo plazo.

El perfeccionismo puede aumentar la tendencia al aislamiento social. Si piensas que debes ser perfecta para ser aceptada por los demás, es posible que evites entablar relaciones y compartir con otros. Esto es fatal para la salud, tanto física y mental. Se ha comprobado que las personas que mantienen buenas relaciones tienden a ser más saludables y a tener una vida más longeva.

A las personas perfeccionistas se les puede hacer muy difícil pedir y/o recibir ayuda. La mayoría de las personas perfeccionistas prefieren resolver todos sus problemas a solas. Si piden ayudan, se sienten imperfectas y si alguien les ofrece ayuda lo perciben como una crítica. Esta tendencia puede afectar la salud de numerosas maneras, desde no acudir al médico a tiempo hasta ignorar por completo las necesidades de cuidado de salud.

El perfeccionismo podría arruinar un plan de adelgazamiento. El perfeccionismo es nocivo para cualquier plan de pérdida de peso. Si te enfocas en seguir un plan al pie de la letra sin tener compasión ni flexibilidad contigo misma, entonces es posible que tarde o temprano pierdas la motivación y no sigas adelante con tu plan. Puede ser que sigas buscando la dieta "perfecta" y te pierdas en esa búsqueda porque nunca nada es suficientemente perfecto.

El perfeccionismo puede aumentar el riesgo de los trastornos alimenticios. El perfeccionismo es una de las principales características de las personas que padecen de trastornos alimenticios, como la anorexia y la bulimina. A menudo el problema empieza cuando se ponen a dieta para alcanzar el "cuerpo ideal". En esa búsqueda por el cuerpo ideal pueden terminar maltrando sus cuerpos con ayunos y dietas muy restrictivas.

El perfeccionismo podría conllevar al abandono personal. Aunque parece contradictorio, algunas personas perfeccionistas tienen un grado de perfeccionismo tan grave que prefieren no intentar hacer nada por miedo al fracaso. Estas personas quizás nunca se atrevan a empezar una dieta ni a tomar pasos necesarios para mejorar su calidad de vida.

¿Te sientes idetificada con algunas de estas actitudes? Yo sí. Tengo que confesar que soy una perfeccionista en recuperación. Cuando me da la tentación de ser perfeccionista, recuerdo una frase que me ha dicho la maestra espiritual, María Mar: " ¿Prefieres ser feliz o ser perfecta". Por supuesto, prefiero feliz.

Imagen vía Thinkstock