Todo es risas y juegos, hasta que volteas al primer espejo del día y observas que no te ves tan fresca como creías…
Sudor sobre la ropa, cabello esponjado, rostro brilloso, entre otras pueden ser las terribles consecuencias de un clima con altas temperaturas, pero por fortuna, hay sencillos trucos que pueden hacer de nuestro look algo siempre fabuloso.
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1.Sudoración excesiva: Si todo marchaba bien hasta que viste esas dos manchas redondas bajo las axilas, no te preocupes. A todas nos pasa y es algo natural. Para evitarlo, usa un anti- transpirante en lugar de un desodorante y procura usar camisas y blusas de manga corta de algodón, que permitan a tu piel respirar.
Recuerda una o dos veces al día, pasar una toallita húmeda sobre tus axilas para que se refresquen y remuevas los malos olores que provoca el calor.
2. Rostro brilloso: Procura usar productos para la piel grasa, que incluyen una base de maquillaje ligera que permita a tu piel respirar. Si usas más polvo del normal sólo taparás los poros y provocarás acné. Compra toallitas contra el brillo y tenlas siempre a la mano. Otra opción es usar una ligera capa de polvo traslúcido por las mañanas.
Bebe mucha agua durante el día para que tu rostro se vea hidratado.
3. Cabello esponjado: Las altas temperaturas pueden hacer que tu cabello se asemeje más al Rey León que a cualquier otra princesa de Disney. Para evitarlo, compra una crema especializada en cabello ondulado, o spray contra el frizz. Lo más práctico es experimentar con peinados recogidos, como trenzas, moños o colitas de caballo.
4. Oler siempre rico: No es necesario que apliques el baño francés y te perfumes de pies a cabeza para marear a todos las personas a tu paso. Usa talco en los zapatos antes de salir y ten siempre toallitas húmedas a la mano para refrescar tu cuello y axilas. Procura no comer platillos con especias o chiles, ya que estos destilan olores fuertes a través de tu cuerpo. Procura comer alimentos frescos y beber mucha agua.
Si tus axilas después de unas horas han comenzado a oler mal, el bicarbonato es un desodorante natural. Aplícalo con un algodón y en las plantas de los pies. Dicen que la cáscara interna del limón, frotada sobre esas zonas también es de ayuda.
5. Mantén tu energía: El calor provoca que muchas veces nos sintamos cansadas y sin energía. La dieta es una de tus grandes aliadas para evitar que esto suceda. Evita alimentos como las donas, platillos fritos y carnes. Estos productos roban toda tu energía porque son difíciles de procesar para tu cuerpo. Come ensaladas y frutas para recuperar el azúcar natural ¡y estar con los ojos bien abiertos!
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