Contradiciendo las recomendaciones oficiales de muchas agencias gubernamentales que advierten que consumir alcohol durante el embarazo puede afectar el desarrollo neuronal del bebé, un estudio publicado esta semana indica que un vaso diario de vino es completamente inofensivo para la criatura. Esta es una de esas noticias que cuando ya pasamos por la experiencia de haber estado embarazadas, nos lamentamos de que no se haya publicado antes.
Y es que para todas las mujeres que nos gusta compartir en reuniones sociales o simplemente disfrutar una copa de vino en nuestro hogar de vez en cuando, es muy difícil e incluso hasta una tortura la larga abstinencia de 9 meses de gestación más el tiempo de la lactancia.
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El estudio del que hablamos fue realizado en la Universidad de Bristol en Gran Bretaña para el que se reclutaron cerca de 7 mil niños de 10 años a quienes sometieron a exámenes de equilibrio, alternando su estabilidad con cada una de sus piernas con los ojos cerrados y también abiertos.
El 70 por ciento de las madres no consumieron nada de alcohol durante el embarazo mientras una de cada cuatro bebió entre 3 a 7 vasos por semana y una madre de cada 20 bebió más de 7 vasos por semana.
Al final, el resultado fue sorprendente: los niños de las mujeres que bebieron más de 7 vasos a la semana presentaron mejores resultados en las pruebas, especialmente la de balance. Los niños de las mujeres que bebieron 7 vasos o menos de alcohol a la semana no presentaron ninguna deficiencia física.
El professor John Macleod, de la Escuela de Medicina Social y Comunitaria de la Universidad de Bristol anotó que "la ingestion moderada de alcohol fue un marcador de ventaja social convirtiéndose en el factor clave para un mejor balance, predominando sobre posibles e imperceptibles efectos dañinos del consumo moderado de alcohol".
Como quien dice que consumir alcohol moderadamente durante el embarazo no le causa ningun daño a los niños y que en cambio les ayudaría a desarrollar un mejor balance.
Sin embargo, este estudio como otros similares establecen claramente que el consumo excesivo de alcohol causa daño a los bebes durante el embarazo.
Este es un tema delicado y controversial en el que al final es importante usar nuestro sentido común, intuición e intelegencia y decidir lo que es mejor para nuestros hijos y para nosotras.
El límite está claro, máximo una copa al día, más de eso es atentar contra la salud del bebé. Si eres de las que todavía le da miedo y te vas a sentir culpable si bebe alcohol mientras está esperando, entonces mejor no lo haga, abstángase y deje la fiesta para cuando el muchacho le cumpla el año, de todas formas y manteniendo una actitud positiva ya tendrá el resto de la vida para celebrar mientras lo ve crecer sano y fuerte.
Imagen vía Thinkstock
